Buscando consolidarse en la cima de la clasificación liguera, la sección femenina del FC Barcelona recibía al Levante en su lucha por tres puntos más para mantener a raya a su similar del Atlético de Madrid, segundo en la tabla. Sin embargo, las visitantes no han sido un rival fácil para las dirigidas por Jonatan Giráldez, que continúan en su lucha por el título.

El compromiso inició con constantes arremetidas de las azulgranas, con Geyse Ferreira tomando la iniciativa en los primeros minutos. La presión daría sus resultados apenas al minuto 14, cuando Ingrid Engen haría gala de sus habilidades para el juego aéreo al rematar de cabeza un bien ejecutado saque de esquina y así poner la ventaja parcial en el marcador.

El Levante buscó la manera de reponerse del golpe, pero las ocasiones generadas por parte de Mayra Ramírez y Paula Tomás no llevaron mayores situaciones de riesgo para el área culé, que se mostraba muy sólida. Posteriormente, parecía que las azulgranas estaban más cerca de firmar el segundo tanto pero faltaba precisión en las jugadas ofensivas en la primera media hora.

Al minuto 40, llegaría el de la tranquilidad para las locales por intermedio de Aitana Bonmartí, quien festejaba su partido número 200 vistiendo la elástica blaugrana de la mejor manera posible: sacándose rivales de encima y dejando sin opciones a la guardameta levantina para poner el 2-0 parcial ya en el tramo final de la primera mitad, una situación muy favorable para irse al descanso.

Partido cerrado ante el Levante

Sin embargo, en esta oportunidad, el Levante sí contó con la puntería necesaria para descontar en el luminoso apenas al 43', una diana que cambiaba totalmente el esquema de Giráldez de cara a la segunda parte, ya que debía preservar una ventaja menor al tiempo que sus jugadoras debían intentar nuevamente marcar distancias para cerrar el partido con tranquilidad.

El inicio del segundo tiempo trajo consigo varias ocasiones de peligro por parte de ambos elencos, pero tanto las zagueras como las porteras estuvieron intratables en su intento de mantener el partido por una diferencia mínima. Incluso Salma Paralluelo lo intentó cerca de la primera hora de juego, pero durante el resto del duelo no se hizo presente el esperado grito. Un 2-1 que mantiene al Barça sólido en la punta.