El FC Barcelona y el Real Madrid firmaron las tablas en el partido correspondiente a la jornada 36 de LaLiga Santander. Luis Suárez adelantó a los azulgranas en el tramo inicial, pero los blancos no tardaron en responder con el empate, obra de Cristiano Ronaldo. En el segundo tiempo, con el Barça con uno menos, Leo Messi volvió a poner por delante a los culés, pero Bale terminó empatando.

En el clásico de este domingo, ninguno de los dos equipos se jugaba nada trascendente que pudiese ser decisivo para el transcurso de un título, LaLiga Santander, que ya estaba sentenciado desde la semana pasada de forma matemática. Sin embargo, los jugadores no se tomaron el duelo en broma. Prueba de ello fue la tensión entre algunos de ellos.

Una de las polémicas llegó a raíz de que el árbitro decidió expulsar a Sergi Roberto. El catalán condujo el balón para acabarlo soltando y Marcelo chocó con él pasándose de frenada. El azulgrana reaccionó con un manotazo al brasileño que terminó suponiendo su expulsión. Sin embargo, la acción pareció diagnosticada de manera muy severa por el árbitro, ya que la acción se podría haber saldado con una simple amarilla.

En el túnel de vestuarios se desató la tensión entre los jugadores. En concreto, llegó en el durante el descanso cuando Gerard Piqué, en el túnel de vestuarios, se acercó a Nacho para comentarle algo relacionado con la decisión de Hernández Hernández de expulsar a Sergi Roberto.

La polémica entre Piqué, Ramos y Nacho

Gerard Piqué se acercó por detrás del defensa del Real Madrid y, tapándose la boca, le hizo un par de comentarios que el madridista no se tomó demasiado bien. "¿Cómo te puedes quejar? Si nos han expulsado 17 veces ya", le contestó Nacho al central del FC Barcelona.

Tras ello, Sergio Ramos se acercó a Gerard Piqué para mantener con él una conversación. Fue bastante breve, ya que apareció la tripleta arbitral y los jugadores se separaron y saltaron al terreno de juego para disputar el segundo tiempo.