Dicen que las estadísticas en el deporte están para romperlas. Eso mismo habrá pensado Ernesto Valverde este sábado tras la victoria del FC Barcelona ante el Athletic Club en San Mamés. Y es que el técnico azulgrana había sido incapaz de sumar ningún triunfo como visitante en el estadio vasco.

Valverde ha acabado con ese maleficio que le había impedido irse de San Mamés con una sonrisa. Hasta el momento, Valverde había encajado cuatro derrotas en Liga y un empate en la Copa del Rey en los cinco enfrentamientos en San Mamés como técnico visitante. Esta noche se acabó la mala racha.

El técnico azulgrana apostó por un once titular competitivo, aunque con las sorpresas de Gomes en el extremo izquierdo y Roberto en el lateral. El portugués volvió a estar mal y Valverde tardó en cambiarlo, pero la suerte estuvo de su parte y las intervenciones de Ter Stegen evitaron un susto.

La historia, rota

Como ya explicamos antes del partido, en su etapa como futbolista Valverde disputó tres partidos en Bilbao como visitante. Los dos primeros fueron con el Espanyol y en ambos cayó derrotado el conjunto blanquiazul, por 2-1 en la temporada 1986-1987 (Sarabia y Urkiaga/Orejuela) y por 2-0 en la 1987-1988 (Urtubi, de penalti, y Uralde). Un año más tarde, ya en las filas del Barça, volvió a caer por 3-2 (Mendiguren 2 y Uralde/Bakero y Julio Salinas).

Ya como técnico, el de Viandar de la Vera se enfrentó en cuatro ocasiones el Athletic en Liga sumando otras tantas derrotas. En las campañas 2006-2007 y 2007-2008, con el Espanyol, perdió por 2-1 (Urzaiz 2/Jonatas) y 1-0 (Garmendia), respectivamente; en la 2009-2010 con el Villarreal por 3-2 (Llorente 2 y Javi Martínez/Cani y Cazorla); y en la 2012-2013 con el Valencia por 1-0 (Muniain).