¡Alarmante! El vestuario del Barça está golpeado y repleto de dudas

La escandalosa goleada propinada por el Paris Saint-Germain este martes por el partido de ida de los octavos de final de la UEFA Champions League ante el FC Barcelona (1-4) en el Camp Nou, significó una dura estocada para un insipirado conjunto dirigido por Ronald Koeman. El recital desplegado por los de Mauricio Pochettino los deja a un paso de consolidar la 'revancha' de aquella remontada en 2017 de los culés, con el famoso 6-1 que todavía está presente en la mente de los parisinos.

El rostro de decepción de Lionel Messi al final del compromiso (se despidió de sus compatriotas Mauro Icardi, Paredes y Pochettino sin siquiera mirarlos a la cara) es la imagen más impactante y dolorosa que se evidenció dentro del vestuario, según algunas fuentes que estuvieron presentes en la zona de acceso restringido a los jugadores. Dicho instante quedó grabado como la enmarcación de una derrota que resquebrajó las barreras que el conjunto había construído de a poco en cada partido ganado tras un difícil arranque de temporada.

Visiblemente tocados por no haber podido plantar una digna batalla ante un rival que fue notablemente superior, por estar a un paso de ser despachado del máximo torneo a nivel de clubes de Europa, y por ver cómo se evaporan las opciones de título en febrero. Lo más duro es que el conjunto azulgrana está consciente de que es la realidad que les corresponde vivir. Bien es cierto que hubo lamentaciones, como la ocasión de Dembélé, la mano de Kean o la chance de Griezmann, pero los gritos de reclamos proferidos por Piqué sobre el campo no se prolongaron en el vestuario, hundido y abatido.

Los jugadores agradecieron el detalle del técnico holandés de darles un par de días de descanso para alejarse del fútbol por unas cuantas horas y despejar la mente. Librarse de la carga que aún queda sobre los hombros, especialmente para Lionel, que fue el principal foco de críticas debido al escandaloso resultado y a su escasa participación o capacidad de respuesta por parte del equipo. Ahora, el Barcelona atraviesa por el momento más álgido en muchos años, y sus jugadores lo saben.

"¿Qué sucederá?"

Es la pregunta que ronda en la mente del fútbol mundial, de los altos dirigentes del club azulgrana y de sus aficionados. No hay más, están a un paso del precipicio de caer definitivamente en octavos ante un club que no ostenta ninguna 'Orejona' en su palmarés. Entretanto, deberá librar una dura batalla ante el Sevilla en el Camp Nou para poder resarcirse un poco para así avanzar a la final de la Copa del Rey y poder lograr alzar un título en esta campaña, un rayo de luz entre tanta oscuridad.