Se ha ganado los elogidos de sus propios compañeros y pretende dar un paso adelante en el FC Barcelona, pero antes de llegar al primer equipo, Denis Suárez ya subió algunos escalones. Poco después de llegar al filial, el gallego se marchó a Sevilla, y tras su paso por el Sánchez Pizjúan, también vivió un gran año en Villarreal.

Probablemente, su estancia en el hoy llamado Estadio de la Cerámica acabara confirmando los motivos que hacen que actualmente el de Salceda de Caselas defienda la camiseta azulgrana, y es que bajo las órdenes de Marcelino García Toral se vio una de las mejores versiones del futbolista.

Lo quería retener Unai Emery en la capital andaluza, pero finalmente se dejó seducir por los 'groguets' y acabó encajando a la perfección en un 4-4-2 similar al que viene utilizando Ernesto Valverde, pegado a la banda. Denis era apreciado por su perfil creativo, combinativo y ofensivo, lo que le permitía tener protagonismo en el ataque y a la vez una obligación defensiva que le hizo crecer como jugador.

Sucesor de Iniesta

En plena batalla por fichar a Philippe Coutinho, no son pocos los miembros del vestuario culé que han señalado a Denis Suárez como el heredero natural de Iniesta, por un estilo de fútbol que también comparte el brasileño, algunos años mayor. A la espera de incorporaciones, el gallego espera seguir asomando la cabeza en los planes de Valverde, para demostrar, paso a paso, que merece un sitio en el Barça del futuro.