El FC Barcelona se enfrentará al Eibar con una defensa en alerta roja
El FC Barcelona se enfrentará al Eibar con una defensa en alerta roja
Publicación:12/03/2015 - 21:09h
Actualización:
Montoya se entrena al margen del grupo y puede agravar la carencia de laterales del Barça en Ipurúa. El lateral derecho tiene molestias dos días antes del partido en el campo del Eibar, donde no podrán jugar ni Dani Alves ni Jordi Alba por acumulación de tarjetas
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El FC Barcelona continúa la preparación de cara al próximo partido de Liga, este sábado (18.00) en el campo del Eibar, en la que será la antesala al Clásico de la jornada siguiente contra el Real Madrid en el Camp Nou. La mala noticia de este jueves para Luis Enrique es que Martín Montoya, que tenía muchos números para ser titular en Ipurúa debido a la ausencia por sanción de Dani Alves, se ha entrenado al margen de sus compañeros por unas molestias físicas.
La de Dani Alves, además, no será la única baja por cubrir frente al conjunto vasco, muy fuerte en casa esta temporada. Tampoco podrá estar presente el otro lateral titular del equipo en la banda izquierda, Jordi Alba (también por acumulación de tarjetas), ni el mediocentro Sergio Busquets, lesionado. Además, Javier Mascherano y Jeremy Mathieu están apercibidos de sanción.
El estado de alarma en lo que respecta a las posiciones defensivas de cara al partido contra el Eibar ha provocado que Luis Enrique llamara a tres jugadores del filial para completar el entrenamiento. Además de los habituales Munir El Haddadi y Sandro Ramírez, que ascienden al primer equipo con asiduidad, "Lucho" ha contado también con el defensa Diawandou Diagne, capaz de desempeñar funciones tanto en la posición de central como en la de lateral derecho.
Xavi podría llegar a los 750 partidos contra el Eibar
Xavi quizá tiene menos minutos que en temporadas anteriores, pero su ascendente en la plantilla sigue siendo importante. Su valoración no se basa sólo en cuestiones numéricas, sino también en las sensaciones. Por tanto, la conclusión es obvia. "Estoy muy contento de no haberme marchado este año y seguir siendo útil para el Barça", dice.
El de Terrassa está a punto de jugar su partido número 750 con el Barça -lo alcanzará si el próximo sábado juega frente al Eibar- y confiesa que "ahora disfruto como cuando empecé. El equipo funciona y eso es lo que más cuenta". "He tenido la suerte de estar en el mejor Club del mundo. Son casi 25 años en la casa y es un orgullo máximo".
