El FC Barcelona va a tener que tomar muchas decisiones este verano en lo que se refiere a la posición de central. Los culés tienen ahora mismo a cinco jugadores para el puesto: Ronald Araújo, Jules Koundé, Iñigo Martínez, Andreas Christensen y Pau Cubarsí, que ya se ha asentado en el primer equipo. El francés y el danés están jugando ahora mismo de lateral derecho y de pivote, respectivamente, pero ambos son y se sienten zagueros, por lo que de cara al curso que viene hay que contarles como tal.

Una nómina de cinco defensores centrales está bien para un equipo grande como el Barça, por lo que en caso de no querer 'tocar' nada, entraría dentro de los normal seguir con todos ellos. El problema es que a los que ya están se les van a sumar como mínimo dos más, que podrían ser tres o cuatro dependiendo de varios factores. Los dos futbolistas que regresarán con seguridad serán Eric García y Clément Lenglet, que volverán tras sus cesiones en el Girona y el Aston Villa, respectivamente. El catalán ha dado un gran nivel con los de Míchel, mientras que el galo, aunque ha tardado en entrar en los planes de Emery, al final lo ha logrado y también se está revalorizando.

Una de las dos incógnitas del Barcelona para sumarse a este 'overbooking' que habrá en fase defensiva es Chadi Riad. El marroquí, que se está 'saliendo' en el Betis, sería una apuesta de presente y futuro, ya que ha probado su nivel en LaLiga y cuenta con un potencial enorme. El problema con él es que el Betis tiene una opción de compra que ejercerá con seguridad, y en ese caso la opción de recompra culé, cifrada en 7 millones de euros, no podrá ser efecctiva hasta 2025. En caso de querer se podría negociar su compra este verano metiendo en la operación quizás el 50% de los derechos de Abde que se guardaron los azulgrana. No obstante, viendo lo poblada que está la posición, lo normal sería esperar al 2025 para 'repescarle'.

Por último, el Barça también podría tener lío con Mika Faye, prometedor central del filial. El senegalés está demostrando en Primera RFEF que la categoría se le queda pequeña y tanto él como el propio club consideran que la próxima temporada debería dar el salto a la élite. El problema es que en el primer equipo no parece haber hueco, por lo que en su caso, a pesar de las brutales condiciones que tiene, lo normal es que se acabe yendo cedido o incluso traspasado con opción de recompra, ya que hay muchos equipos pendientes de él.

Eric solo tendrá opciones si se van Koundé o Christensen

Teniendo en cuenta todos los casos, el FC Barcelona tendrá que decidir con quién quedarse. Ronald Araújo y Pau Cubarsí parecen los únicos indiscutibles a día de hoy, aunque la necesidad de hacer caja con alguien para poder fichar en otros puestos hace que la salida del charrúa no sea 100% imposible. No obstante, en la entidad priorizarían las salidas de Koundé o de Christensen, aunque el danés ha vuelto a dejar claro que no se mueve, lo que complica todo más. Iñigo, tras llegar este pasado verano, probablemente también se quedará como fondo de armario. 

Una vez aclarado que las salidas de los actuales integrantes del primer equipo no van a ser sencillas, Eric y Lenglet tienen todas las de perder. El francés no convence y es un descarte claro, por lo que la idea es intentar sacar una buena cifra por él. Con García hay más dudas, ya que aún es joven y tiene un estilo que encaja a la perfección en el Barça. Koundé o Christensen salieran, el del Girona se quedaría con casi total seguridad, pero si no hay movimientos con los que ya están va a tener casi imposible quedarse.