En medio de la temporada 2022/23, el tren ejecutivo del FC Barcelona se prepara para llevar a cabo varios movimientos clave en el apartado de renovaciones. Hasta el momento, el más importante es el de Sergio Busquets, cuyo contrato expira en verano, en tanto que el siguiente en prioridad será el de Ousmane Dembélé, quien por ahora sigue recuperándose de una lesión.

El contrato del internacional francés quedará sin efecto el verano de 2024 y la directiva azulgrana quiere concretar cuando antes el acuerdo para evitar inconvenientes con su agente, como los que tuvieron lugar durante el pasado proceso para extender el vínculo contractual del delantero. El 'Mosquito' es una pieza vital en el ataque del equipo de Xavi Hernández, por lo que su presencia en la plantilla es prioritaria.

Primeros contactos para renovar

Actualmente, Dembélé se siente a gusto en el equipo azulgrana, especialmente después de que el míster le diera una segunda oportunidad cuando todo parecía indicar que se vería 'condenado al ostracismo' por no haber renovado en el último año de su contrato anterior. Desde entonces, el galo ha gozado de regularidad durante la temporada, pero la última extensión contractual fue por un breve período.

De acuerdo con el diario 'Sport', ha habido conversaciones entre las partes durante las últimas semanas y el panorama es alentador. El francés es consciente de cuál será su rol en el proyecto deportivo de Xavi Hernández y espera que el club esté dispuesto a poner sobre la mesa una oferta económica convincente para continuar vinculado a la entidad catalana más allá de 2024.

La 'amenaza' del PSG

Estos movimientos tienen lugar justo después de que los rumores sobre el interés del Paris Saint-Germain volvieran a cobrar fuerza. Los galos quieren juntarle con su compañero de selección, Kylian Mbappé, mientras que también podría tener ofertas desde Inglaterra. 'Dembouz' tiene una cláusula de rescisión con un importe de 50 millones de euros. El Barça quiere renovarle, pero el obstáculo es la masa salarial.