El FC Barcelona confirmó este lunes el fichaje de Andreas Christensen por las próximas cuatro temporadas. El central danés llega procedente del Chelsea como agente libre, después de casi diez años en la entidad 'blue'. Será uno de los refuerzos para la defensa azulgrana, donde ya están Gerard Piqué, Eric Grcía y un Ronald Araújo que apunta a ser el gran líder de los culés en zona baja. 

Christensen viene de una temporada bastante irregular bajo las órdenes de Thomas Tuchel en el Stamford Bridge, pero es un jugador que encaja en los planes del cuadro azulgrana y que cuenta con el perfil de los centrales del Barça, sobre todo por su buena salida de balón. El danés no se incomoda a la hora de hacerse con el esférico y progresar con él, por lo que apunta a ser importante en el planteamiento de Xavi, aunque lo más probable es que entre en rotación. 

Donde más ha destacado el central de 25 años es una defensa de tres, tanto en el Chelsea como en la selección danesa, siendo 'fijo' como central derecho. En la pasada temporada, disputó 34 partidos con dos goles y una asistencias. 29 de los enfrentamientos los jugó como titular. Si bien es cierto en unos cuantos partidos dejó muchas dudas (como contra el Real Madrid en el Stamford Bridge), es un jugador que contaba con el total apoyo de sus entrenadores: Tuchel, Sarri o Lampard. 

Si hay algo por lo que ha destacado Christensen desde su 'despegue' durante su cesión en el Mönchengladbach, es que es un central muy ágil con y sin balón, que suele reaccionar de manera muy rápida ante la presión rival y que, además, sabe anticiparse al peligro para evitar que el contrario pueda hacerse con el balón. Asimismo, en el Chelsea ha sido capaz de empezar las jugadas desde atrás para ayudar en la construcción hasta llegar a la zona del ataque rival. 

Relación que puede ser muy fructífera

El central danés aparece en zona ofensiva para dar superioridad al equipo y subir la línea defensiva, valiéndose además de su regate para no dejarse arrastrar por la presión contraria, un factor clave para sus conducciones. No obstante, entre los aspectos que deberá mejorar para que su estadía en el Spotify Camp Nou sea más fructífera está su timidez en ciertos casos, puesto en varios partidos ha pasado desapercibido (contra el Madrid se notó) por no ser impetuoso o ir 'fuerte' al choque. Eso sí, lo compensa con su inteligencia táctica y concentración máxima en el terreno de juego, intentando estar atento para, como mencionábamos antes, anticiparse al peligro.