El FC Barcelona está esperando el visto bueno de LaLiga respecto al plan de viabilidad que presentó hace una semana. El club quiere encaminar el fichaje de Leo Messi y también los respectivos movimientos que tiene planificado de cara al próximo mercado, donde podrían haber hasta cuatro incorporaciones más aparte del argentino.
Sin embargo, en los despachos necesitan reducir un total de 200 millones de euros en gastos para encajar todo dentro del Fair Play financiero y así contar con suficiente margen de maniobra. La dirección deportiva ya ha hecho las evaluaciones pertinentes y entiende que hay cinco operaciones que deberán producirse para que todo llegue a buen puerto.
El Barça reducirá sus gastos
La primera de ellas pasa por reducir los salarios del primer equipo masculino entre 50 y 60 millones, comenzando por una rebaja sustancial de los capitanes al igual que otros miembros dentro de la plantilla con salarios elevados. Otro punto sería un ahorro de 30 'kilos' en los emolumentos de los demás equipos profesionales que maneja la institución, como el Barça Femení, La Masía y las secciones de hockey, baloncesto, balonmano y fútbol sala.
A estos se les suma la rebaja por costes operativos del cierre de 'Barça TV', que supone unos 12 millones de euros menos en pérdidas, y también la economización de las nóminas que no corresponden a las secciones deportivas. Aquí están incluidos todos los departamentos del Barcelona y representarían un ahorro de 10 millones en las oficinas.
La 'Operación Salida' es una prioridad
Por último entraría en pie el escalón de los nuevos ingresos. El club necesita generar, como mínimo, 70 millones de euros por las vía de patrocinios o la venta de futbolistas del primer equipo. De momentos, los nombres señalados serían los de aquellos que dejarían un beneficio neto en las arcas y cuyas fichas se encuentran totalmente amortizadas, como la de Ansu Fati —que se formó en la cantera— o Franck Kessié, quien llegó gratis desde el AC Milan.
Todo esto permitiría al Barça generar suficiente Fair Play para mejorar las relaciones con la patronal de Javier Tebas, y también proceder con todas las inscripciones y renovaciones pertinentes, además de concretar el ansiado regreso de un Leo Messi que a día de hoy sigue esperando una propuesta formal del club a pesar de contar con un cheque en blanco desde Arabia Saudí.