El pasado mes de enero el FC Barcelona ya se planteó ciertas cuestiones a nivel de planificación por el límite de jugadores extracomunitarios, y su reflexión va a volver este verano. La configuración de la plantilla dependerá en algunos puntos de las decisiones que tomen los técnicos al respecto, y es que antes de ponerse a certificar altas y bajas es una incógnita que conviene despejar.

Actualmente, Paulinho, Philippe Coutinho y Yerry Mina son los tres futbolistas que no cuentan con un pasaporte europeo. Con los brasileños entre los habituales del equipo, el colombiano tiene su futuro en el aire, porque llegó en invierno para cubrir las necesidades de la defensa y se ha comprobado que necesita más minutos de juego para adaptarse al fútbol del viejo continente.

El hecho de que su crecimiento no se pueda desarrollar en la exigencia continua del Camp Nou ha abierto una puerta a que se marche cedido, algo que podría confirmarse en unas semanas. En esta línea de actuación, Arthur, una de las incorporaciones previstas para la campaña 2018-19, está cerca de adelantar su llegada a la Ciudad Condal, y precisamente podría ocupar su plaza.

El problema añadido es que en la órbita del conjunto catalán hay otros cracks que tampoco tienen el cartel de comunitarios, como el reciente caso de Hirving LozanoEl mexicano es una de las revelaciones de la Eredivisie y ha llegado al Mundial de Rusia pisando fuerte, pero aunque existe un interés formal, los culés están atados de pies y manos.

Coutinho tiene la llave de los fichajes del Barça

Con el Barça buscando soluciones para cuadrar sus planes, la alternativa más sencilla es la de Philippe Coutinho, que podría obtener un pasaporte portugués gracias a la doble nacionalidad de su esposa Aine. El carioca ya inició los trámites necesarios para recibir la documentación, pero este es un proceso que habitualmente requiere tiempo y tardará algunos meses en completarse.

Así, contando con el ex el Liverpool, el vestuario tendría un hueco más para un fichaje de más allá de las fronteras europeas, pero deberá elegir bien entre sus posibles objetivos. Si acaba llegando alguno, tardará bastante más en poder desbloquear el resto de situaciones, y hasta entonces estará limitado al mercado comunitario.