La llegada de Philippe Coutinho no es la única operación que tiene el FC Barcelona pendiente, pero sí puede condicionar en cierta manera los próximos pasos de los catalanes en el mercado. Si se confirma la incorporación de Yerry Mina, uno de los que quedarán descartados es Arthur, que no podría desembarcar de momento en el Camp Nou.

En la últimas semanas se ha confirmado que el interés azulgrana por el joven del Grémio de Porto Alegre no estaba ligado al del ya ex del Liverpool, es decir que el de Goiania no era una de las conocidas alternativas. Sin embargo, en cierta manera, su futuro sí está unido, y en concreto dependerá de los movimientos de los próximos días.

Tras asegurarse a Coutinho, el próximo en caer será Yerry Mina, la elección definitiva para el central. El inconveniente es que junto a Paulinho ocuparían los tres cupos destinados a futbolistas extracomunitarios, por lo que no se podría añadir a otro brasileño al vestuario.

El Barça, pendiente

Así, la entidad culé ha empezado a buscar soluciones que permitan la llegada de Arthur, y la que más fuerza ha tomado es la de ofrecerle una cesión al propio Grémio. Ernesto Valverde tiene demasiadas alternativas en el centro del campo que cerrarían el paso a un jugador que apenas tiene 21 años, un motivo más para que se quede en Brasil.

El joven iría puliendo sus prometedoras cualidades y el Barça lograría rebajar los 50 millones de euros que se piden por su traspaso. Mientras tanto se podrían poner en marcha los trámites para obtener la nacionalidad española de Paulinho, que necesitaría acumular dos años de residencia para liberar su puesto. Esto, contando que se haga oficial, situaría la llegada de Arthur sobre junio de 2019. Habrá que esperar.