Hace unos meses que el FC Barcelona empezó las negociaciones para renovar a las piezas más importantes de su plantilla, pero a día de hoy todavía tiene algunos casos pendientes. El club ha dejado caer que hasta bien entrado 2019 no habrá más movimientos de cara a extender contratos en el primer equipo, y hay algunas cuestiones abiertas que amenazan con enredarse con las intenciones de algunos rivales.

Uno de los que está a la espera de una llamada de la directiva es Jordi Alba, cuya vinculación expira en 2020. El lateral y su entorno han encajado con cierta sorpresa que ni siquiera se hayan iniciado los contactos para hablar sobre el tema, y empieza a haber inquietud debido al silencio que separa de momento a ambas partes.

En Inglaterra aseguran que en medio de esta situación se ha colado el Manchester United, que está intentando acercarse al crack para sondear su disponibilidad de cara a un traspaso. Si existiera la mínima duda en el de L'Hospitalet y se planteara cambiar de aires, en Old Trafford activarían la maquinaria y lanzarían una ofensiva por su fichaje.

Esta alternativa, pese a todo, parece complicada porque la voluntad del canterano es continuar en el Barça, donde se ha consolidado como uno de los mejores laterales del mundo y donde ha visto incluso aumentada su influencia desde la llegada de Ernesto Valverde. En lo deportivo no tiene queja, pero ahora toca dar un paso al frente también en los despachos.

Jordi Alba e Ivan Rakitic, un ejemplo para el Barça

En medio de un mercado que cada vez se basa más en los números y menos en la fidelidad, el Barça se ha llevado dos alegrías con Ivan Rakitic y Jordi Alba. El croata ya ha repetido en varias ocasiones que pese a rechazar las ofertas que tuvo en verano, no espera un premio en forma de mejora de su contrato, y que decidió quedarse por su adaptación a la ciudad, por su amor al club y por la comodidad que vive desde hace años.

En la misma línea se pronunció el catalán, al que de momento no se le cuenta ninguna propuesta en firme pero ha dejado claro cuáles son sus perspectivas. "Mi intención es quedarme en el Barça toda mi vida, ojalá pueda retirarme en el Barça", lanzó en una entrevista reciente, subrayando que, al menos por su parte, el futuro está muy claro.