El Paris Saint-Germain ha reventado el mercado de fichajes este verano, realizando las dos inversiones más altas hechas jamás hasta la fecha. 222 millones de euros por Neymar y 180 por Mbappé, que serán pagados en 2018 tras llegar a un acuerdo 'trampa' con el Mónaco para que este curso se contabilice como una cesión.

Y a raíz de esto la UEFA ha abierto una investigación para intentar averiguar de dónde procede el dinero del conjunto francés, algo que muchos dirigentes de equipos de la Ligue 1 también han denunciado. El último, Vadim Vasilyev, vicepresidente del club monegasco, que no se explica cómo el PSG burló el "Fair Play".

Vasilyev ha reconocido que para el Mónaco ha sido un varapalo perder a Mbappé: "Fue un traspaso muy duro. Al principio no queríamos dejarlo ir a un competidor directo, pero siempre he compartido una buena relación con su padre, que también es su agente", explicó el dirigente a la agencia "TASS" en declaraciones de las que se hace eco 'Sport'.

Claro que ha admitido que la oferta era completamente irrechazable: "Era un trato entre tres parties. Y los Mbappes (padre e hijo) siempre decían que iba a hacerse con los mejores términos para nosotros. Finalmente, el PSG pagó el precio que pedimos, que fue más que lo que nos ofrecieron otros clubes europeos".

El Barça pasó de él

Tal y como contó 'TV3' hace unos días, el Barça pudo acometer su fichaje este mismo verano, pero Bartomeu prefirió esperar a ver cuál era el futuro de Neymar y posteriormente Robert Fernández le convenció para que el fichaje fuese Ousmane Dembélé. El tiempo dirá si es un acierto o no.