Aunque hay algunas cuestiones a mejorar, el proyecto de Ernesto Valverde ha empezado con buen pie en el FC Barcelona, con una Copa del Rey que ya está en el saco y una Liga que podría caer en pocos días. Después de haber sufrido muchísimo en el mercado de fichajes del pasado verano, los catalanes trabajan para evitar problemas en el siguiente, pero no va a ser nada sencillo.

Las incorporaciones, que parecían claras hace algunas semanas, están de momento a la espera. Si finalmente hay acuerdo, dos de los elegidos son Antoine Griezmann y Arthur, aunque habrá que ver si se confirma la llegada del delantero y si el centrocampista es una apuesta definitiva. El capítulo del central también será para tener en cuenta.

El mayor desafío volverá a ser sin duda la operación salida, que sin ni siquiera haber empezado ya inquieta en el Camp Nou. Hay muchos casos pendientes de resolución, e incluso en los más claros ya empiezan a surgir obstáculos. Los azulgrana pretenden vender, y vender bien, en los próximos meses, pero deberán hacer un esfuerzo.

Al Barça ya le piden rebajas por sus descartes

Entre los cedidos de la escuadrá culé hay algunos proyectos interesantes que están cuajando en sus nuevos clubes. Los Rafinha Alcántara, Gerard Deulofeu o Munir El Haddadi han llamado la atención en los últimos meses, y el Barça está interesado en hacer caja con su marcha. 

Él inconveniente es que desde Inter de Milán o Watford ya estan pensando en rebajar la cantidad que se pide por ellos, algo que romperá las perspectivas y obligará intensificar las negociaciones, metiendo además a los futbolistas. El catalán y el hispano-marroquí acaban contrato y se intentará ampliación venta, y al brasileño será difícil colocarlo por los 35 millones que alcanza su opción de compra.

El tema molesta profundamente a los directivos, ya que ni siquiera con jugadores prometedores logran encontrar una salida beneficiosa. Si en estos, que son los que mejores previsiones tienen, ya están ocurriendo imprevistos, no quieren ni pensar en otros como Arda Turan o Douglas, que serán muchísimo más difíciles de colocar. Se avecina otro mercado caliente.