Neymar y el Paris Saint-Germain quieren separar sus caminos en las próximas semanas, aunque ese deseo del equipo francés no parece que pueda ser muy posible. Y es que a pesar de que el brasileño también veía con buenos ojos poner punto final a su etapa en la capital francesa; las exigencias económicas del futbolista no las puede cumplir ningún equipo, al menos por el momento.

A pesar de su lesión de larga duración que sufrió en su tobillo en febrero, el jugador sigue convencido que debe cobrar una ficha superior a los 20 millones netos por temporada. Ese es un suelo que ni Manchester United ni Chelsea, los mayores interesados en el '10', pueden permitirse por un jugador que ya ha superado los 30 años y llegará a la pretemporada después de seis meses sin estar sobre el césped.

En París parece que tendrán que asumir todo

El entorno del futbolista ha explorado con interés la opción de iniciar una nueva aventura en Inglaterra, pero las negociaciones se han estancado en punto muerto y no han avanzado en los últimos días, según ha apuntado 'Sport'. Ambos equipos han hecho números para comprobar la viabilidad de la incorporación del brasileño, pero la única manera sería haciendo un contrato de cinco años, algo que un futbolista de 31 años tan propenso a las lesiones no parece ser el indicado pare recibir.

Con este escenario todo indica que Neymar seguirá jugando en el Parque de los Príncipes, pudiendo además quedarse solo en el PSG este verano si finalmente Kylian Mbappé cumple con su deseo de salir, sumándose a la de Messi, que no renovará y sigue esperando al FC Barcelona. La única esperanza para los galos podría estar en que el qatarí Sheikh Jassim pudiera finalmente adquirir al United e intentar tirar la casa por la ventana en su primer mercado.

El futuro no pareciera demasiado ilusionante

El deseo del equipo francés de salir de Neymar se debe a que solo ha logrado superar superar la treintena de partidos por temporada desde que fichó por el PSG en una ocasión: la 2020/21 y con 31 encuentros. A esto se le suma que sus goles y asistencias han venido siempre en decadencia desde la 2017/2018, algo que en este curso parecía que podría superar (llevaba 18 y 17) pero terminó nuevamente en la enfermería.