Según las informaciones publicadas por el Daily Star esta semana, el FC Barcelona ya ha tomado una decisión sobre su interés en fichar a Paul Pogba: renunciarán a traerle este verano y lo intentarán a partir del próximo mes de julio. Pese a que el francés no está a gusto en Old Trafford, el Manchester United se ha negado en roturno a dejarle salir.

De este modo, el FC Barcelona aparcaría su sueño de fichar a Paul Pogba este verano, aunque lo seguiría teniendo en mente de cara al verano que viene. Se espera que la presión del jugador para salir de Old Trafford y sus ganas por vestir de azulgrana acaben siendo determinantes de cara a un jugador ansiado para completar la plantilla de Ernesto Valverde.

Hay que tener en cuenta que el FC Barcelona había visto este verano como centrocampistas determinantes como -Andrés Iniesta y Paulinho Bezerra- o no tan determinantes -como André Gomes- hacían las maletas para marcharse a otros equipos, por lo que hacían falta relevos de garantías en el centro del campo.

El primer fichaje de la presente ventana de traspasos fue Arthur Melo, un mediocentro organizador de perfil técnico que llegó al Camp Nou para aportar atributos al juego del Barça similares a los que aportaba Andrés Iniesta. Arturo Vidal, llegado más recientemente, venía a ocupar el sitio de Paulinho, como mediocentro experto en la presión, la recuperación y la llegada desde segunda línea.

No obstante, el FC Barcelona también sondeó la llegada de un tercer efectivo en referencia a la oportunidad de mercado que se daba con Pogba: el centrocampista francés no se lleva bien con José Mourinho, entrenador del Manchester United, y el jugador estaba ansioso por abandonar Old Trafford y jugar de azulgrana al lado de Leo Messi o de compatriotas como Samuel Umtiti o Ousmane Dembélé.

Rabiot, más asequible

Dado que las contrataciones de Paul Pogba y de Frenkie de Jong se han complicado mucho por las posturas de sus respectivos equipos, Adrien Rabiot suena como la opción mas asequible para acabar de reforzar el centro del campo. El mediocentro francés termina contrato con un PSG que se ve acechado por la normativa del 'fair play' financiero, que le podría obligar a vender.