La firme postura de Marcos Alonso sobre su continuidad en el Barça

Marcos Alonso está siendo uno de los protagonistas de la actualidad del FC Barcelona porque, a falta de una semana para que cierre el mercado de fichajes de verano, todavía no ha sido inscrito. Desde el club han explicado que, por su ficha (que ascendería a los nueve millones de euros), ha sido muy cuesta arriba hacerle hueco en la masa salarial. Esta situación ha provocado que se 'disparen' los rumores sobre su futuro y una posible salida de la Ciudad Condal. 

El jugador de 32 años no entra en la lista de intocables de Xavi Hernández, aunque sí es importante. Desde el Barça no se cierran a la posibilidad de que haga sus maletas tan solo una temporada después de su aterrizaje desde el Chelsea, pero según una reciente información de 'Mundo Deportivo', el madrileño ha cerrado la puerta a esa posibilidad y apuesta por seguir luchando por un puesto en el XI del entrenador egarense.

Marcos Alonso no se mueve

Alonso entiende que se ha ganado la posibilidad de seguir en el conjunto azulgrana y que, por ello, el club le renovó en enero de este año. Firmó una primera temporada positiva en la que se convirtió en un 'apaga incendios' en la defensa ante el gran número de lesiones a lo largo del curso. Por ello, no tiene la intención de moverse durante este verano y así se lo ha transmitido a los representantes de la dirección deportiva, según la fuente antes citada.

El futbolista de 32 años también pone en consideración que se ha sacrificado mucho en este último curso para ayudar al club. Perdonó dinero cuando aterrizó en la recta final del mercado de fichajes veraniego del 2022 y también cuando accedió a renovar a la baja en enero. Entiende que, ahora, le corresponde al Barça hacer un esfuerzo para registrarle en LaLiga, igualmente que a Iñaki Peña e Iñigo Martínez. 

¿'Ganaría' el Barça con la salida de Alonso?

No hay que pasar por alto que, a ojos de LaLiga, Marcos Alonso es agente libre. Si bien selló su renovación en enero de este año, el contrato nunca fue registrado y, por ende, carece de valor para la patronal. En este sentido, el Barça no podría pedir una tarifa para la salida del central madrileño y quedaría sin efecto, también, la cláusula de rescisión que incluía el acuerdo de 50 millones de euros. Para el club, su 'adiós' solo tendría impacto en el Fair Play financiero, puesto se ahorrarían su ficha.