Neymar se marchó del FC Barcelona el pasado verano después de que el Paris Saint-Germain le ofreciera un suculento contrato antes de pagar su cláusula de rescisión de 222 millones de euros. El club azulgrana, de este modo, se quedaba sin uno de los grandes faros ofensivos del equipo y sin el jugador que debía continuar con el legado de Leo Messi.
Desde entonces, el FC Barcelona se ha gastado una importante cantidad de dinero para tratar de hacer olvidar al delantero brasileño. En concreto, el gasto total ha ascendido a 146 millones de euros que podrían subir hasta 187, si se cumplen todos los variables pagados por los fichajes de Malcom y de Ousmane Dembélé.
La temporada pasada, el FC Barcelona necesitaba desesperadamente un jugador que pudiese cumplir las tareas de Neymar en ataque y el elegido fue Ousmane Dembélé. El extremo francés llegó a costar 105 millones de euros fijos más otros 40 en concepto de variables. El Borussia Dortmund no dejó pasar la oportunidad de sacar una buena cantidad por su estrella.
Después de una temporada irregular por parte del extremo francés, el club azulgrana ha decidido aumentar la competencia en el puesto de extremo derecho con la incorporación de Malcom, que ha acabado costando 41 'kilos' más otro posible en función de variables. Esta temporada, ambos deben dar un paso adelante para ser piezas clave en ataque.
El gasto total del Barça asciende a 385 millones de euros
Pese a que los refuerzos de la delantera han costado 146 millones, el resto de incorporaciones incrementan el gasto hasta los 385 millones de euros, con un posible pago de 90 más en variables. El FC Barcelona ha reforzado al equipo con defensas y centrocampistas para paliar otras bajas importantes como, por ejemplo, la de Andrés Iniesta.
El FC Barcelona, además de los 146 millones de Dembélé y Malcom, pagó 40 millones por Paulinho (aunque ha sido vendido un año después por 50), 120 más por Philippe Coutinho (con opción de pagar 40 en variables), 11,8 por Yerry Mina, 31 por Arthur Melo (más otros 9 en variables) y 35,6 por Clément Lenglet.