Este lunes 26 de febrero se ha abierto con mucha intensidad, después de las informaciones que apuntan a que el PSG estudiaría proponer un trueque entre Kylian Mbappé y Philippe Coutinho para atar la continuidad de Neymar. Pese a que la operación no tendría sentido a ojos del FC Barcelona, habría un posible escenario en el que podría cuajar.

Cabe destacar que esta opción no se basa en perspectivas reales, sino más bien en un intercambio de intereses que tendría más cabida en un juego de 'PlayStation' que en la propia vida real, algo que los 'bleus' parecen dispuestos a superar. Tomando nota de las posibles alternativas de los refuerzos culés, la única propuesta viable sería que el francés llegara con una importante suma de dinero por parte de los galos.

Con el brasileño camino de París, los catalanes deberían descartar a Antoine Griezmann, ya que tendrían un delantero para muchos años, y podrían destinar su inversión en el que sonó como el principal relevo de Coutinho, Christian Eriksen. El danés está demostrando en el Tottenham que está preparado para marcar la diferencia en el fútbol de alto nivel, y se adaptaría a las exigencias del Barça.

Además de sus numerosas cualidades y una polivalencia perfecta para encajar en el centro del campo, el de Middelfart ha reconocido en más de una ocasión que sería imposible decir 'no' a la posibilidad de jugar en el Camp Nou, aunque debería ponerse una ingente cantidad de euros sobre la mesa de los 'spurs'.

El Barça no abandonará a Coutinho

A pesar de que a nivel deportivo sería un cambio muy complicado pero asumible, a nivel personal el Barça ni se lo plantea. La apuesta por Philippe Coutinho no sólo fue futbolística, sino, precisamente, personal, y a nadie se le pasa por la cabeza abandonar a un jugador que puso tanto de su parte por desbloquear la imperturbable negativa del Liverpool.

La llegada del de Río de Janeiro al vestuario ha confirmado lo que ya se esperaba de él, un futbolista que llega para sumar, y que además de Luis Suárez ha hecho buenas migas con Leo Messi y varias de las estrellas que dirige Ernesto Valverde. Dejarle en la estacada sería un error histórico e imperdonable.