Marco Verratti era el gran fichaje que el FC Barcelona planeaba en verano de 2017. El centrocampista italiano, considerado el heredero natural de Xavi Hernández en ese momento, gustaba mucho en el club azulgrana ya que se le veía como una forma directa de conservar el estilo de posesión que había garantizado el éxito hasta la fecha.

Sin embargo, el Paris Saint-Germain cerró la puerta y anunció que el centrocampista italiano no estaba en venta. Además, Nasser al-Khelaïfi, enfurecido por los intentos del equipo culé para llevarse a su estrella, contraatacó donde más le dolía al barcelonismo: ofreciéndole un dineral a Neymar para convencerle de marcharse a París.

Ya han pasado casi dos años desde esa secuencia, y todo sigue igual. Marco Verratti sigue en el conjunto francés esperando a poder optar a la Champions League, un objetivo que se aleja año a año. No obstante, parece que el que fue considerado como el 'nuevo Andrea Pirlo' en sus primeros años de carrera, lo seguirá intentando en París.

"Sí, me quedaré en París. Si no pasa nada y el club no quiere deshacerse de mí, volveré a jugar aquí el próximo año", comentó el mediocentro italiano, en una entrevista concedida a 'Telefoot'. De este modo, Verratti se cierra la puerta a una posible salida y da un paso adelante en su renovación. A sus 26 años, parece que su intención es la de seguir en la Ligue 1.

Además, de cara a este próximo curso, el PSG tiene previsto volver a reforzarse con grandes fichajes para de esta manera equilibrar todavía más la plantilla y no sólo amarrar los títulos franceses, sino también dar la sorpresa en la Liga de Campeones, donde suele decepcionar durante las últimas temporadas, sin haber llegado todavía a unas semifinales.

Verratti ya no es necesario en el Barcelona

En el FC Barcelona, viendo que el fichaje de Marco Verratti era imposible, se lanzaron a por la incorporación de Arthur, un jugador de características similares que no está defraudando en su primera temporada. Además, de cara al próximo curso, los culés han atado también a Frenkie de Jong, el crack del Ajax. Sumando también la juventud de Riqui Puig y Carles Aleñá, el mediocentro del PSG ya no es necesario.