Si Neymar Jr acaba regresando al FC Barcelona, necesitará muchas tardes y noches de magia para reconciliarse al completo con la afición del Camp Nou. Y es que un buen sector del barcelonismo no olvida que el brasileño 'traicionó' al Barça cuando decidió marcharse al Paris Saint-Germain en agosto de 2017, apenas unos meses después de haber firmado la renovación con el conjunto culé.
El brasileño puso rumbo a la capital francesa y, aunque nunca tuvo malas palabras hacia el club azulgrana ni hacia la afición culé, sí generó antipatías al querer cobrar la famosa prima de renovación de 26 millones de euros. En resumidas cuentas, un amplio sector del barcelonismo puso entonces la cruz a Neymar Jr, y será complicado que se la quite a las primeras de cambio.
Es el caso de un ex azulgrana como el 'Lobo' Carrasco, quien ha dejado muy clara su postura con respecto al posible regreso del jugador brasileño. "No perdonaría a Neymar ni aunque llegase al Camp Nou de rodillas", ha expresado en unas declaraciones concedidas a 'El Chiringuito', y que han recogido otros medios como el diario 'Sport'.
El colaborador culé de 'El Chiringuito' opina que Antoine Griezmann debería ser el elegido del FC Barcelona para reforzar la delantera, y nadie más. Curiosamente, Carrasco sí aceptaría el fichaje del jugador del Atlético de Madrid a pesar de que éste también sembró la polémica el pasado verano, cuando decidió rechazar la oferta del Barça a través de un documental retransmitido en todo el mundo.
Neymar y Griezmann, con un hándicap añadido en el Barça
Sea como sea, y a pesar de las posibles antipatías que puedan despertar Neymar Jr y Griezmann, una cosa está clara. Si fichan por el FC Barcelona y empiezan a marcar goles con frecuencia, se ganarán poco a poco el perdón absoluto del barcelonismo.
La clave, eso sí, es que se dejen la piel en el campo y jueguen a tope, porque a la mínima que la afición culé vea resquicios de conformismo y de mal juego... Serán los primeros jugadores de la plantilla en llevarse silbidos. Si los dos 'cracks' desean vestir la elástica azulgrana, por tanto, deberán interiorizar que en el Barça hay que trabajar desde el primer minuto.