La salida de Xavi podría propiciar la apuesta total del Barça por Ansu Fati

Uno de los nombres que está en la agenda de la dirección deportiva es el de Ansu Fati, cuya cesión en el Brighton finaliza el 30 de junio de este año. Su futuro no está claro, porque no ha tenido la continuidad que hubiese esperado y también le han perjudicado los eternos problemas físicos que le han acompañado desde que debutó en la élite. De hecho, va recuperándose de una lesión que le mantuvo dos meses en el dique seco. 

En Brighton ha tenido la suerte de encontrarse con un Roberto de Zerbi que se ha caracterizado, en su trayectoria como entrenador, por potenciar a los jugadores jóvenes. Fue él quien apostó por su traspaso, en la recta final del mercado de fichajes invernal de 2023, y mantiene la confianza en él a pesar de que no ha podido demostrar el nivel que le había 'catapultado' en sus primeros años en el Barça. 

Y es que, cuando debutó en el primer equipo azulgrana, superó todas las expectativas. Estaba llamado a ser el gran 'talento' de La Masia y le veían como el relevo generacional de Leo Messi, pero sus constantes lesiones no le permitieron dar el paso adelante que tanto necesitaba. Después de una temporada y media en el alambre con Xavi Hernández, tomó la decisión de marcharse para buscar nuevas oportunidades. 

¿Segunda oportunidad para Ansu Fati?

Ahora, a falta de cuatro meses para que termine la temporada, el futuro de Ansu vuelve a estar en debate. En el Brighton están a la espera de ver cómo termina desenvolviéndose en el resto de la temporada, pero lo que si parece improbable es que estén dispuestos a mantener el salario 'completo' del jugador, que es el más alto de la plantilla. En el Barça empiezan a evaluar la posibilidad de que regrese en verano para reforzar la delantera.

En caso de que los azulgrana no sean capaces de acometer la incorporación de algún extremo para reforzar la banda izquierda, considerarán la permanencia de Ansu en el equipo. Con la salida de Xavi -quien nunca confió en el jugador de 21 años- puede ser una oportunidad de oro para que el atacante tenga un 'segundo baile' en el Barça. Dependerá, en cualquier caso, de quién se siente en el banquillo a partir de la próxima temporada.