El mercado de invierno está a punto de abrir sus puertas, pero entre los grandes equipos de Europa, la planificación podría esperar hasta el veranoNo son pocos los que han advertido que enero no es un mes ideal para meterse en reformas, y eso podría posponer durante unos meses varios movimientos de gran magnitud en el viejo continente.

El que recientemente ha dado mucho que hablar es el Atlético de Madrid, porque ha confirmado un paso adelante en sus aspiraciones y ha consolidado una plantilla de máximo nivel a base de fichajes y renovaciones. Los rojiblancos no quieren que los adversarios 'toquen' a ninguno de sus referentes, aunque tendrán que andarse con ojo en el camino hacia el final de la temporada.

Varias informaciones apuntan que hay hasta tres aspirantes que pretenden pagar la cláusula de rescisión de Saúl Ñíguez, que a sus 24 años es un indiscutible en el Wanda Metropolitano y en la selección española. El ilicitano se ha ganado a pulso que le traten como uno de los mejores centrocampistas del planeta, algo que, obviamente, ha llegado vinculado a un interés que crece por momentos.

Manchester City, Bayern de Múnich y PSG estarían dispuestos a abonar los 150 millones de euros que certificarían la salida del crack, al que intentan tentar con un sueldo todavía más alto que el que le ofrecieron los madrileños y con la posibilidad de luchar por títulos nacionales e internacionales, algo en lo que su club todavía tiene margen de mejora.

Precisamente, el mayor obstáculo para estos pretendientes sería la voluntad del jugador, que siempre ha mantenido una indudable fidelidad al Atlético. El esfuerzo económico mayúsculo no valdría para nada si no cuenta con su aprobación, por lo que la alternativa del 'clausulazo' parece demasiado difícil de concretar. Al menos, hasta que el joven se replantee sus intenciones.

Barça y Real Madrid, ¿descartados en la lucha por Saúl?

Precisamente, los dos grandes de LaLiga ya han preguntado en alguna ocasión por el fichaje de Saúl, pero casi siempre han encontrado 'bloqueos' que se lo han impedido. El Barça estuvo cerca de convertirle en un gran refuerzo, pero el Atlético aprovechó su convencimiento y extendió su vinculación en un momento de dudas. El Real Madrid, por su parte, cuenta con el dinero para hacerse con sus servicios, pero dado su sentimiento rojiblanco, el ilicitano ha subrayado que nunca se mudaría al Santiago Bernabéu.