Aunque poco a poco parece que los fichajes de Íñigo Martínez y Philippe Coutinho se van acercando, al Barça le está costando más vencer la resistencia del Borussia Dortmund. Los alemanes no quieren desprenderse de Ousmane Dembélé, y es por eso que siguen pidiendo una cifra exagerada por el traspaso del delantero francés.

Las amenazas que los dirigentes del conjunto negro y amarillo lanzaron hace unas semanas a los azulgrana han dejado paso a otra postura: En el club saben que el futbolista sueña con jugar en el Camp Nou, pero si quiere marcharse deberá dejar una gran cantidad de millones en caja.

Así lo expresó el director deportivo de los germanos, Hans-Joachim Watzke, que cuestionado por el futuro de su prometedor extremo avisó que "100 millones de euros no son suficientes para fichar a Dembélé". El Borussia es consciente de la capacidad económica que tiene el Barça tras la marcha de Neymar, y es por eso que no va a rendirse sin reclamar lo que es suyo.

Prisas relativas

A pesar de que Ernesto Valverde ha insistido al Barça en la necesidad de cerrar la plantilla cuanto antes, el club es consciente que debe ser rápido pero sin comprometer el futuro de sus operaciones. El inminente inicio de la temporada oficial apremia, pero la paciencia también es clave en un mercado de fichajes en el que se han disparado los precios.