Hace apenas unos días que se cerró el mercado de fichajes de invierno, y en Francia aseguran que lo hizo dejando otro lío en el seno del PSG. Mientras en la capital intentan alcanzar en su camino a los títulos una tranquilidad que no llega, se suceden los conflictos en un grande marcado por las polémicas, y en esta ocasión se avecina revolución en el Parque de los Príncipes.
Hasta hace unos meses, el rendimiento de Antero Henrique en la dirección deportiva estaba fuera de toda duda, pero ahora le rodean las sospechas. El portugués colaboró directamente en la consolidación de un proyecto que se hizo mayor con las incorporaciones de Neymar y Kylian Mbappé, dos operaciones en las que su papel resultó determinante, pero desde hace un tiempo, sólo acumula borrón tras borrón.
La lista de decepciones de los 'bleus' ha aumentado recientemente, con casos como los de Frenkie de Jong, Adrien Rabiot o Lucas Paquetá. Al luso se le reprocha que dejara escapar al holandés y al brasileño tras estar muy cerca de su contratación, y además hay cierto malestar por sus fricciones con el canterano, que se negó a renovar y ahora ha sido castigado por el club, una decisión en la que sí le apoya el presidente.
Pero el nuevo lío lo ha desatado el entrenador, Thomas Tuchel, que reconoció abiertamente que no hay entendimiento entre el banquillo y el dirigente. "Yo tengo mis opiniones y él tiene las suyas", comentó el alemán en rueda de prensa, haciendo referencia a otra discusión que, según los medios el país, podría tener nombre y apellidos, que no son otros que los de Thiago Motta.
El centrocampista italo-brasileño colgó las botas hace unos meses, y el de Krumbach ha reclamado desesperadamente un refuerzo que no ha llegado. Ha perdido a Rabiot, Marco Verratti y Lassana Diarra están lesionados y sólo ha aterrizado en París Leandro Paredes, una promesa que no acaba de satisfacer sus exigencias porque buscaba un futbolista con un perfil más recuperador y defensivo.
El verano de 2019 podría traer novedades al PGS
Así, y como cada uno rema en su propia dirección en vez de todos a una, no son pocos los que aseguran que el verano podría traer novedades al PSG, y que podría acabar con la destitución de Antero Henrique. El adiós de Tuchel también sería una solución, pero parece más alejada porque el preparador germano ha caído con buen pie y tiene el apoyo de la plantilla, que incluso ha llamado la atención al portugués a través de algunas de sus figuras. Es difícil que haya calma en el Parque de los Príncipes, y en breve habrá otro capítulo en el interminable culebrón parisino.