Hace algunas semanas que inicio su pretemporada, pero este sábado el calendario se convirtió en oficial para un PSG que conquistó la Supercopa de Francia ante el Rennes. Los pupilos de Thomas Tuchel se llevaron un susto en el compromiso disputado en China porque su adversario se adelantó primero, pero Kylian Mbappé y Ángel Di María aparecieron a tiempo para amarrar el título.

Aunque el partido fue animado, uno de sus grandes alicientes estuvo en la grada, donde Neymar no lo pasó nada bien. El de Sao Paulo descansó en el palco presidencial del Shenzen Universiade Sports Centre junto al resto de descartes de los 'bleus', y no se sabe si por los problemas físicos que le dejaron 'tocado' en el último entrenamiento o por su deseo de abandonar el club, estaba visiblemente ausente y desconectado, y ni siquiera celebró los tantos de sus compañeros.

Los momentos más incómodos para el brasileño llegaron cuando tocó celebrar, ya que el ambiente era de ilusión y festejos sobre el césped y el delantero caminaba arriba y abajo como si todo el jolgorio no fuera con él, dedicando algunas sonrisas obligadas a aquellos que se acercaban pero sin excederse más de lo necesario, cumpliendo el expediente como ha hecho desde que regresó de sus vacaciones.

Cuando llegó la fotografía a los campeones, se quedó en un lado, y Marco Verratti le estiró del brazo para que apareciera junto al resto del grupo. El italiano le abrazó y por fin el ex del Santos dejó algunas muestras de alegría, apoyado también por Mbappé y dejando un instante para que el club aprovechara y lo capturara en las redes sociales, donde los 'bleus' trataron de apagar un incendio que ya es difícil de esconder.

Pero la situación más comentada fue la que se dio con el de Bondy, cuando el galo empujó a Neymar para apartarle de su lado antes de otra foto. El '10' estaba hablando aún con el centrocampista y el campeón del mundo le sacó bruscamente, regalándole una sonrisa socarrona antes de que se volviera a recolocar para la instantánea. 

El PSG esconde el malestar de Neymar en la Supercopa

Pese al revuelo que se produjo en las redes sociales, el PSG trató de esconder el malestar de Neymar, con una publicación en la que escribió "¡Qué felicidad!", y en la que promocionó justo el momento en el que el brasileño, Verratti y Mbappe aparecían festejando. Los aires de crisis siguen rondando París, y habrá que ver si el regreso a Francia no provoca nuevas reuniones entre el entorno del paulista y la directiva.