El AC Milan ha sido notificado en las últimas horas de la sanción que ha recibido por parte de la UEFA, que ha decidido excluir al mítico club italiano de competiciones europeas durante los próximos dos años, por incumplimiento del 'Financial Fair-Play'. En concreto, la Cámara de Adjudicación del Comité de Control Financiero de Clubes (CFCB) ha castigado al Milan por haber gastado en una temporada más de lo que ingresó el curso anterior.

Y es que el AC Milan invirtió el pasado verano de 2017 unos 200 millones de euros en el mercado de fichajes, y ante las dudas de cumplimiento del 'Fair Play Financiero' por parte de la UEFA, presentó un plan económico para intentar resolver la situación, algo que fue rechazado en diciembre de 2017 por el máximo organismo del fútbol europeo.

En este sentido, el AC Milan no jugará la Europa League esta próxima campaña y tampoco podrá hacerlo la siguiente en el caso de clasificarse por méritos propios en la Serie A. La sanción, eso sí, puede recurrirse todavía ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte, algo que no se espera que solucione demasiado las cosas para los 'rossoneri'.

La sanción al AC Milan podría ser un aviso para navegantes, dado que otros clubes como el Paris Saint-Germain también se encuentran en una situación delicada en lo que respecta al cumplimiento del 'Financial Fair-Play'.

Por el momento, no ha habido castigo para el PSG tras los multimillonarios fichajes de Neymar y Mbappé, porque los galos alcanzan por ahora los requisitos necesarios, aun estando realmente al límite. Han pasado unos meses de análisis y exámenes diversos, pero tras un importante debate, el máximo organismo del fútbol europeo ha concretado que en esta ocasión no habrá penalización para los de París... De momento.

La UEFA seguirá analizando al PSG

A día de hoy, la única consecuencia será que habrá supervisión durante unos meses más y que los franceses deben recuperar 60 millones de euros en ventas antes de que acabe junio. Esta es la única vía para que se mantengan en el margen de déficit estipulado, ya que, si no, sí que podrían recibir un castigo correspondiente a la próxima temporada y seguir en alerta para las próximas.

"El impacto financiero (en el año 2018) de los movimientos en el mercado de fichajes desde el verano de 2017, incluidos los de la próxima ventana (la de este verano), sigue sujeto a una estricta supervisión", aclaró semanas atrás la UEFA, haciendo referencia en gran medida a los pagos que se deben afrontar por Kylian Mbappé, cuyo coste de 180 millones de euros fue camuflado a través de una cesión con opción de compra obligatoria.

Otro de los puntos calientes en las observaciones son sus contratos de patrocinio con varias entidades con sede en Qatar, que se ajustaron en el momento justo para esquivar una sanción que por momentos parecía cantada. Estas relaciones continúan bajo sospecha, pero no se han encontrado datos que refuercen la necesidad de tener que cumplir condena. El PSG, por ahora, se ha 'salvado' de posibles sanciones.