El jugador germano, que defendía a un jugador de Italia en un centro de la "azzurra" al área rival, llevó a cabo un gesto de "bailarina" al estirar completamente los brazos y desviar el balón con la mano. El colegiado no dudó a la hora de señalar penalti, y Leonardo Bonucci fue el encargado de poner las tablas en el marcador hasta el final del partido, y luego la prórroga.
No es extraño, en este sentido, que las redes sociales se inundaran a los pocos minutos de una gran cantidad de "memes" sobre el descalabro de Boateng en el área de Alemania, todos ellos la mar de divertidos. El caso es que la imaginación de los aficionados no tiene límites, y son muchos los montajes fotográficos hilarantes que transitan por todo el mundo.
Esta vez, por tanto, Boateng tomó todo el protagonismo de los "memes" alemanes y relevó a Joachim Löw, el seleccionador, que en los últimos partidos había protagonizado escenas desagradables al tocarse sus partes íntimas y luego olerse los dedos. Por fortuna para Boateng, remedió a medias su error en la tanda final de penaltis, anotando una de las penas máximas que sirvió para dar la victoria a Alemania.