Nuevo ‘golpe’ para Haaland en el Dortmund… ¡Eliminados de Copa!

A solo un mes después de quedar eliminado de la Champions League, el Borussia Dortmund de Erling Haaland volvió a sufrir un durísimo golpe a nivel deportivo. Ante el mítico Sankt Pauli, actualmente en la segunda división alemana, el vigente campeón de la Copa de Alemania cayó derrotado (2-1) y, de esta manera, se despidió de la segunda competición de tres que disputa esta temporada.

Para el delantero noruego, que pudiera estar disputando su último curso vistiendo la negriamarilla borusser, puede suponer el aviso final al tiempo de tomar la decisión definitiva de abandonar el club. Al Dortmund solo le queda una Bundesliga que, pese a los incontables goles del potente ariete, ocupa actualmente la segunda posición de la tabla a un total de seis puntos del Bayern.

Ocurrió como en tantas ocasiones ha sucedido en la Pokal. El Borussia Dortmund saltó al césped con la confianza propia de ser un equipo de primera división y enfrentarse ante uno de segunda. No tardó en pasarle factura a los de Rose. Los hamburgueses fueron con todo el vigor a luchar cada balón y, merecidamente, se pusieron por delante en el marcador a los cuatro minutos de partido gracias a Amenyido.

Tras el tanto del cuadro de segunda división, Reus el empate en sus botas, pero no pudo definir para el Dortmund y así empatar el partido y, a falta de cinco minutos para el descanso, un tanto en propia de Witsel puso muy cuesta arriba el partido para un Borussia que se vio inmediatamente maniatado ante la inminente eliminación. Por su parte, Haaland no daba crédito.

Reacción, sin mayores frutos

Tuvo que reaccionar el Dortmund y lo hizo gracias a la mano de Medic que, gracias al VAR, supuso penalti para los de negriamarillos. Fue el delantero noruego el que tomó la responsabilidad de ejecutar la pena máxima, recortando diferencias y poniendo el primer granito de arena a la hora de evitar el bochorno que supondría caer en la Pokal ante un segunda que no mostró síntomas de ser un rival inferior, y siguió asediando a un BVB que, evidentemente, no estaba acostumbrado a este tipo de partido.