Ousmane Dembélé parece ha encontrado la estabilidad en París que nunca, o casi nunca, tuvo en Barcelona. El extremo francés ha entregado mejores sensaciones después de un inicio algo complicado en el que las cifras no acompañaban con su desequilibrio habitual, siendo ya desde hace varias semanas el máximo asistente de la Ligue 1, con ocho pases de gol, y su asociación con Kylian Mbappé está siendo una de las principales armas de Luis Enrique en la temporada, como quedó demostrado este martes ante la Real Sociedad.
En verano, el Paris Saint Germain ejecutó su cláusula de rescisión, pagando 50 millones al FC Barcelona, y desde entonces el crecimiento en cuanto a continuidad para el extremo ha sido más que notable. En total, Dembélé ha disputado 30 partidos con la camiseta del PSG, siendo titular en 24 de ellos, algo que rápidamente hace resaltar el hecho de que no se ha lesionado en todo lo que va de curso, algo que en el Barça simplemente nunca pasó.
Dembélé parece volver a ser aquel jugador del Dortmund
Además, Luis Enrique este martes le mostró al mundo un 'nuevo' Dembélé después que se viera al francés con una versión llena de libertad en zonas internas, algo que recordó mucho a su explosión con el Borussia Dortmund en la temporada 2016-17, la última además en la que no se perdió ningún partido por lesión. El jugador incluso estuvo colaborando defensivamente en algunas jugadas, siendo más un centrocampista ofensivo que un delantero puro, algo que en el club azulgrana tampoco se vio en sus seis años en la entidad.
Aunque ciertamente el curso anterior entregó un gran rendimiento con Xavi Hernández, las cifras también muestran que se perdió 19 partidos y estuvo lesionado 89 días, algo que además hace que esté a solo 175 minutos (casi dos partidos) de igualar los 2.169 minutos que disputó la pasada temporada con la camiseta azulgrana. Simplemente parece un jugador nuevo, o al menos parece capaz de recuperar su mejor versión en cuanto a combinar talento con regularidad.
Este martes además logró estrenarse en cuanto aportes de gol en la Champions League, haciéndolo como asistente para uno de los dos goles de Mbappé. Más allá del tremendo rendimiento de Kylian, Dembélé está siendo ese jugador en el que el PSG también puede confiar, sobre todo ahora que el propio club ha dejado muy claro que no planifica su futuro con la presencia del de Bondy.