Nuevamente, el Paris Saint-Germain culmina una temporada con balance económico negativo, pero esto no inmuta al Emir de Catar y su ambición por conquistar la Champions League y dominar el fútbol europeo. El club cerrará el ejercicio económico de la 2021-22 con pérdidas cercanas a los 300 millones de euros, según explica 'L'Equipe', números rojos aún peores a los registrados durante la temporada anterior (-235 'kilos').

No obstante, la directiva seguirá invirtiendo dinero y realizará cambios profundos en la plantilla de cara a la 2022-23. A los números filtrados por 'L'Equipe' falta añadir el megacontrato de renovación de Kylian Mbappé (50 millones netos de salario por tres temporadas más una prima de renovación de 100 'kilos'), 250 millones que acumulan un saldo negativo récord asegurado para el final del ejercicio económico de la 2022-23. 

Al respecto, Javier Tebas, presidente de LaLiga, presentó una denuncia contra el PSG y el Manchester City por incumplir el 'fair play' financiero de la UEFA. La enorme inyección de capital que Catar garantiza al Paris parece hacer inmune al club a las pérdidas, sin importar cuán altas sean, una situación similar a la que se produce con el 'City Football Goup', entidad dueña del conjunto 'sky blue' financiada por Abu Dhabi.

Para la 2022-23, el PSG está obligado a vender a varios jugadores para cuadrar cuentas, algo que no pertuba en absoluto a la directiva encabezada por Nasser Al-Khelaïfi. El también presidente de la Aosicación de Clubes Europeos (ECA) deberá prescindir de jugadores como Mauro Icardi, Raphinha, Pablo Sarabia, Kalimuendo, Areola y Sergio Rico para abrir hueco en la plantilla a la llegada de refuerzos.

El PSG ya tiene cuatro fichajes casi cerrados

Más allá de no haber resuelto el relevo de Mauricio Pochettino en el banquillo, la dirección deportiva encabezada por Luis Campos ya ha tiene casi hechos los fichajes de Nuno Mendes (Sporting CP) y Vitinha (Porto). Además, pretenden ir tras Milan Škriniar y Renato Sánchez, con lo cual podrían gastarse alrededor de 200 millones de euros. La chequera del Emir de Catar seguirá activa, a pesar de las quejas de Tebas y LaLiga. ¿Y el 'fair play' financiero? La solvencia del PSG es inmune a estos controles. Por ahora.