La temporada 2019-20 ha tenido numerosos altibajos para el PSG, que vuelve a mirar con preocupación a la Champions League. Los galos han seguido el mismo camino que en los últimos años, ya que metían miedo semanas antes de las eliminatorias y estrenaron el cruce de octavos de final con una peligrosa derrota por 2-1 en el Signal Iduna Park ante un inspirado Borussia Dortmund. Y ese no es su único problema.

Pese a que la felicidad parecía haberse instalado en la capital con buen fútbol y buenas sensaciones, de nuevo hay dudas sobre Neymar. El ex del Santos había estado en el punto de mira por los motivos correctos, pero cuando todos hablaban de su adaptación, de su madurez y de cómo estaba acercándose a su mejor versión, estalló la guerra en el Parque de los Príncipes tras un fatídico partido en casa ante el Montpellier.

El 1 de febrero, el crack quedó 'tocado' por una lesión en las costillas, y no le gustó cómo se gestionó su proceso de recuperación porque llegó a Alemania sin ritmo. Según 'L'Équipe', sus declaraciones tras el duelo contra los germanos no fueron su única medida de presión, y es que había echado otro pulso al club unos días antes. Tras un partido de Copa en el que también fue reservado, se tomó la justicia por su mano.

El citado medio asegura que el de Sao Paulo se habría negado a entrenar tras la cita con el Dijon. Los 'bleus' ganaron por 1-6 y tras el choque hubo una suave sesión para los titulares y una con más carga para los suplentes, pero el brasileño prefirió quedarse con los que sí habían jugado. Siempre según esta versión, habría respondido que estaba descansando cuando fue reclamado para que se ejercitara junto al resto del grupo.

De esta forma, Neymar contestó a la decisión de los médicos y a los comentarios de Thomas Tuchel, que no confirmaron su presencia ante el equipo de la cuenca del Ruhr. "No puedo asegurar al 100% que esté en el partido ante el Borussia Dortmund", apuntó el técnico en la rueda de prensa posterior a la vista al Stade Gaston Gérard. Y a su pupilos no le gustó el exceso de precaución que volvía a disparar contra su fragilidad.

A vueltas con la renovación de Neymar

Una lesión fortuita, una rajada y algún que otro pulso han vuelto a empañar la renovación de Neymar, que en Francia se daba por cercana tras la subida de nivel del futbolista y su relativa tranquilidad en París. Habrá que ver si el ex del FC Barcelona sigue pensando en quedarse y liderar el proyecto o mantiene su deseo del pasado verano, en el que no escondió que pretendía volver al Camp Nou para recuperar su felicidad perdida.