El nuevo delantero de la plantilla del FC Barcelona, Paco Alcácer, entró en la segunda mitad del partido contra el Leganés para dar minutos de descanso a Luis Suárez ya con todo el pescado vendido en Butarque, y dispuso de alguna que otra oportunidad de ver puerta en el segundo encuentro que juega en las filas del conjunto azulgrana.

De hecho, llegó a marcar un gol después de un rechace al centro del área del portero rival, pero el colegiado De Burgos Bengoetxea anuló la diana por un ajustado fuera de juego, que el valenciano insistió en asegurar al árbitro que "no era", a tenor de lo que enfocaron las cámaras de televisión.

En cualquier caso, a Alcácer se le ve sediento de gol y cada vez está más cerca de reencontrarse con la pólvora, olvidada por ahora. No tuvo demasiada presencia sobre el campo, dado que todavía necesita adaptarse más a los esquemas de juego del Barça de Luis Enrique.

Cuando lo haga, se prevé que se convierta en un agente muy favorable a la hora de dosificar los minutos de las grandes estrellas de ataque y, además, contribuir también anotando goles importantes como hacía Pedro Rodríguez cuando todavía era culé.

De momento, a sus 23 años lo único que le queda a Paco Alcácer es aprender lo más rápido posible y, poco a poco, ganarse el cariño y la confianza de todo el barcelonismo a base de buenas actuaciones. Si sigue esforzándose, seguro que tarde o temprano las encontrará.