Corría el minuto 84 y el Barça ya ganaba uno a cinco al CD Leganés. Sin embargo y con los defensas pepineros hinchándose a pegarle patadas a Neymar Júnior, una jugada acabó desquiciando al atacante brasileño. Fue tras una falta concedida a favor de lso locales y por la que Ney protestó. El colegiado del partido De Burgos Bengoetxea no entendió del todo bien y le amonestó por ello.

Eso hizo que el jugador se irritase más y se encarase con otros jugadores del Leganés. En ese momento apareció Rafinha Alcántara para sacarlo de allí y evitar que le sacasen una segunda amonestación. Eso molestó todavía más al atacante que se encaró con su amigo e incluso le mandó a un sitio desagradable. 

Tal y como se pudo ver en directo durante el partido, Neymar se quita de un manotazo a Rafinha que no reacciona tampoco bien a esto. Sin embargo, el doce prefirió retirarse de la zona y no añadir más leña al fuego. Sin embargo, tras el partido el centrocampista la quitó hierro al asunto.

Rafinha zanjó la polémica en zona mixta

El propio Rafinha quitóimportancia al juego duro del Leganés en los últimos minutos:  "El fútbol es duro, es así. Tanto el juego bonito como el fútbol duro. Nosotros estamos preparados para recibir de todo". Sobre el rifirrafe con su compatriota, tuvo a bien decir que "partido caliente, pelea de hermanos", sostuvo "Rafi" que añadió en forma de broma que "ya no somos más amigos, lo odio". Finalmente, concñuyó diciendo que "es como mi hermano, si nos hubiéramos pegado puñetazos no hubiera pasado nada".