Desde que se inició la pretemporada, el FC Barcelona consideró a Ousmane Dembélé un jugador clave e intransferible. Solamente la llegada de Neymar, que no se llegó a producir, podría haber supuesto su marcha como cedido al Paris Saint-Germain. Pero el club le consideró importante desde el primer momento y el francés respondió con una actitud más profesional y responsable.
El francés recortó sus vacaciones para ponerse a las órdenes de Ernesto Valverde antes de lo que le tocaba y se puso manos a la obra. Pesos pesados de la plantilla como Sergio Busquets reconocieron que habían detectado un cambio de actitud muy positivo en él durante el verano y lo expusieron públicamente, haciendo presagiar que el 'mosquito' picaría más fuerte que nunca.
No obstante, Dembélé se topó nuevamente con el lastre que lleva tiempo soportando desde que llegó al FC Barcelona: las lesiones. En el primer partido de LaLiga Santander, en San Mamés contra el Athletic Club, sufrió una rotura en el bíceps femoral de la pierna izquierda, con un tiempo de baja estimado de cinco a seis semanas.
Eso sucedió a mediados de agosto y un mes después, ya piensa en regresar a los terrenos de juego. El objetivo del francés es estar en plena forma para poder tener minutos en Los Cármenes, en el partido que se jugará este fin de semana contra el Granada. Sabe que esta temporada la competencia es fuerte y quiere reclamar su puesto con su talento.
No obstante, Ernesto Valverde no piensa arriesgarse a volver a perderle. En este inicio de Liga, canteranos como Carles Pérez o Ansu Fati le han dado un gran rendimiento, motivo por el que no parece necesario forzar a Dembélé para que juegue si realmente no está al cien por cien. Una nueva lesión podría ser un golpe muy duro.
El puesto de Dembélé
En verano, Ousmane Dembélé sabía de primera mano que la competencia en la delantera sería dura por la presencia de Leo Messi, Luis Suárez y el recién llegado Antoine Griezmann. Lo que escapaba de su control era la irrupción de Carles Pérez y Ansu Fati, que suponen dos nuevos retos para él, que quiere alcanzar la titularidad.