Ousmane Dembélé está viviendo su mejor temporada en el FC Barcelona, a pesar de que en las últimas semanas ha quedado relegado al banquillo ante el crecimiento de la dupla Messi-Griezmann. El francés ha superado sus problemas físicos y se ha 'enchufado' para demostrar todo su potencial con los azulgrana, lo que le ha convertido en una de las piezas ofensivas más importantes del planteamiento de Ronald Koeman. 

Recientemente, el 'Mosquito' ofreció una entrevista a 'beIN SPORTS' en la que repasó varios aspectos de su actualidad con el conjunto azulgrana y habló de su estilo de vida, muy criticado antes, pero que ha cambiado para mejorar su estado físico y convertirse en el jugador que toda la afición azulgrana espera. 

Con respecto a ello, apuntó que "no se puede jugar cuatro años en el Barça sin un estilo de vida saludable", razón principal por la que ha hecho varios cambios en su vida que le han permitido dejar atrás, de cierto modo, el calvario que vivió con las lesiones y problemas físicos en sus primeras temporadas vistiendo la elástica azulgrana.

Por otra parte, fue cuestionado por su jugador y entrenador favorito. Dembélé se acordó de su etapa en el Borussia Dortmund, donde 'estalló' como jugador y se ganó el interés de media Europa, con el Barça incluído. "Aubameyang es la persona que más me gustó del fútbol. Tuchel es mi entrenador favorito, habría sido difícil dejar el Dortmund si no se hubiera ido", resaltó.

También ha hablado de lo que ha vivido en su etapa en el FC Barcelona, que no ha sido sencillo. Sin embargo, ahora está viviendo un momento positivo y, según ha reconocido, su relación es muy buena con el vestuario. "Ahora que estoy jugando bien, en el vestuario me llaman Eto'o. Messi nos ayuda mucho", sentenció el francés. 

Sin pistas sobre su futuro

El paso de Dembélé por el Camp Nou ha estado lleno de piedras en el camino. Sin embargo, después de esta temporada, en las oficinas azulgrana están convencidos de que quieren que firme una renovación de su contrato, que vence en el verano de 2022. El problema es que su entorno ha dado muchas largas al asunto y no terminan de reunirse con los directivos para llegar a un acuerdo.

En la charla con 'beIN SPORTS', el delantero no ha dejado muchas pistas con respecto a su decisión de quedarse o no en el Barça, pero sí reconoció que está muy bien por ahora. En concreto, apuntó que "estoy feliz en Barcelona, veremos qué pasa con mi futuro".