Denis Suárez, el joven que creció con el Barça de Ronaldinho

Si bien sólo estuvo una temporada en el Barça B, lo de Denis Suárez y el FC Barcelona viene desde hace mucho tiempo. El futbolista gallego confiesa en una entrevista concedida a "MD" su pasión por el conjunto azulgrana desde que era un niño. Eso y la magia de Ronaldinho hicieron el resto.

"Fue cosa de mi padre. Mucha parte de mi familia es del Madrid y mi padre siempre fue del Barça. De pequeño hubo tira y afloja porque el sector blanco me quería del Madrid, pero yo tiré hacia mi padre y tuve la suerte de crecer con el Barça de Ronaldinho. Me acuerdo de aquel gol a las 12 de la noche al Sevilla... Imagínate lo que es para mi padre tener a su hijo en el Barça. Le hace una ilusión tremenda", confesó ilusionado.

Y del Barça más actual destaca a Andrés Iniesta como un ídolo total. "Sin duda. De él me gusta todo: su regate, su cambio de ritmo, su último pase. Y ser ejemplo no sólo de fútbol, también en lo humano y profesional. Llegaron jóvenes al primer equipo y supieron esperar a ser indiscutibles", atinó a decir para posteriormente dejar claro que no le costará adaptarse al estilo del Barça pues ya lo vivió con Eusebio en el filial.

"(Sobre Eusebio) Representa una filosofía Barça, el juego de posición. Empecé con él de interior y nunca había jugado en un 4-3-3. Estaba acostumbrado a ser mediapunta y me movía por todos los lados, siempre buscando el balón. Al segundo partido, un día me sentó en su despacho, me puso un vídeo y me dijo: "Estas son tus zonas: por aquí te mueves y te esperas a que te llegue el balón y a partir de ahí empiezas a actuar. ¿Sabes por qué? Porque aquí todos son muy buenos y no es necesario que vayas por todos los rincones a buscar el balón. Ten paciencia y verás cómo te acaba llegando la pelota", explicó.

"Con Unai y Mancini mejoré mucho en la fase defensiva. Y sobre todo con Marcelino"

Pero no sólo del entrenador vallisoletano ha aprendido Denis, pues ha tenido grandes entrenadores: "Intento seguir lo que me dicen. Tienes que escuchar para progresar. También con Unai y con Mancini mejoré mucho en la fase defensiva. Y sobre todo con Marcelino, con quien cuando sales con un 4-4-2 los que jugamos un poco más por fuera, que éramos Jonathan Dos Santos y yo, si no trabajabas para llenar la zona ancha estabas muerto. Este año corrí... ¡Madre mía, lo que no está escrito! Defendí un montón".

Y por último, un alago hacia Leo Messi, quien a su juicio es el mejor "sin duda, el mejor. No vi nunca a un jugador como él desde que sigo el fútbol. Tiene todos los registros. Y su humildad en el campo marca la diferencia: juega para el equipo y cada día es mejor. Igual sabes qué regate te va a hacer y aunque le encimen tres, te lo va a hacer igual".