Xavi Hernández decía tras el empate frente al Osasuna que los futbolistas más jóvenes sostienen al FC Barcelona; algo de lo que, después de lo visto en las últimas semanas, no queda duda. Ronald Araújo, Nico, Gavi, Abde... se están convirtiendo en el motor de un equipo huérfano de líderes. Son los únicos capaces de marcar la diferencia, de mostrar 'ganas' o intención de hacer algo diferente, pero esto no es suficiente y es una realidad que los más experimentados de la plantilla tienen que asumir de inmediato. 

Es una situación positiva y negativa, como explicó Xavi, porque no siempre van a estar en un modo extraordinario. Son jugadores jóvenes que tienen derecho a equivocarse y que lo harán, una y otra vez, para crecer como futbolistas. Es parte del proceso. Aún tienen mucho por aprender, pero en esta 'dinámica' de ser los únicos líderes del equipo, queda la sensación de que tampoco tendrá tiempo para cometer errores. Y ese es el verdadero peligro. 

El 'Dream Teen' sostiene al Barça, sí, pero no pueden ser los únicos. Necesitan la experiencia, la tranquilidad y el ejemplo de sus compañeros. De momento, no están encontrando un 'feedback' en el vestuario y se quedan como el único recurso de los azulgrana en cada partido. Si ellos brillan, el Barça tiene posibilidades de ganar, pero incluso en ese panorama, es complicado. Y el empate contra el Osasuna fue la mejor prueba de ello. Nico abrió el marcador después de un pase de Gavi y luego Ez Abde puso el 1-2. Fueron 'insuficientes', porque los rojillos terminaron empatando. 

No es una crítica para ellos, evidentemente, porque lo hacen todo en el Barça. Es un recado para los Frenkie de Jong, Ter Stegen, Dembélé... los que verdaderamente tendrían que estar llevándose al equipo a la espalda y no lo están haciendo. Ni en El Sadar, ni en Múnich, Da Luz o en el mismo Camp Nou. No son los jugadores determinantes, con ímpetu o capaces de cambiar un partido, más allá de los destellos que puede dejar el francés cuando juega. Tienen que asumir galones, ser líderes... y por allí pasa la nueva 'era' culé. 

Ímpetu en medio de la apatía

Los 'niños' del Barça (porque van de 16 a 20 años, a excepción de Araújo con 22) son la luz en medio de la tormenta de apatía de los jugadores azulgrana. Habrá días que ellos mismos amarrarán los resultados, otros que lo intentarán y no será suficiente, como en El Sadar, y otros días en los que no podrán conseguirlo. Tienen la confianza, que es lo importante, y saben que son el futuro del club... Solo falta quiénes los guíen en el camino.