El Camp Nou se enfadó cuando Valverde sustituyó a Arturo Vidal, pero había motivos

LaLiga 2018-19 sigue cargada de emociones, y esta vez en río revuelto fue el FC Barcelona el que acabó pescando. Los culés se quedaron con el liderato tras imponerse al Villarreal en la Ciudad Condal, poco después de un tropiezo del Atlético de Madrid contra el Girona en Montilivi y horas antes de que el Deportivo Alavés frenara al Sevilla en su visita al estadio de Mendizorroza.

La actuación de los catalanes después de dos jornadas sin ganar fue muy seria, y pese a los intentos de los castellonenses y la estrecha distancia en el marcador -diferencia mínima hasta los instantes finales-, se puede decir que el encuentro estuvo controlado. El Camp Nou disfrutó de lo lindo con los lujos de un inspirado Ousmane Dembélé, pero también hubo una acción en la que expresó su descontento.

Corría el minuto 70 y Ernesto Valverde realizó la primera sustitución del duelo, y el elegido fue Arturo Vidal. Esta decisión no gustó nada a la grada, que pitó durante unos segundos antes de deshacerse en aplausos hacia el centrocampista, que en las últimas semanas ha encontrado la continuidad que buscaba. La ovación se extendió también a Carles Aleñá, que saltó al terreno de juego en su lugar.

Al chileno se le vio sorprendido y resignado tras ver su número en la tablilla, y se marchó cabizbajo hasta llegar a la frontera entre el campo y el banquillo. Para evitar jaleos como el que hace meses le puso bajo la lupa, el de Santiago dedicó una sonrisa y un guiño al técnico, saludándole con tranquilidad y esquivando un incendio antes de sentarse junto al resto de sus compañeros.

Existen dos motivos que podrían empujar al extremeño a dar descanso al ex del Bayern de Múnich, pese a que los seguidores no lo entendieran en el momento. Precisamente, Vidal no se entrenó tras el triunfo contra el PSV Eindhoven, por una contusión leve en el muslo que no le impidió participar en la sesión del viernes. Tal y como está la enfermería, lo mejor es no correr más riesgos.

Además, la Copa del Rey está a la vuelta de la esquina, y entre la normativa y los lesionados puede que no haya demasiado margen para rotaciones. Esto hace que cualquier minuto de refresco para las piernas de los teóricos titulares sea más que necesario, lo que explicaría porqué le ha tocado al sudamericano, que ha pasado a la lista de indiscutibles.

Dos cambios acertados de Ernesto Valverde

El estadio mostró mucha más comprensión poco más tarde, cuando Malcom salió para relevar a Philippe Coutinho, y aplaudió a rabiar cuando la apuesta de Valverde se convirtió en ganadora. Un pase de Leo Messi dejó solo a Carles Aleñá frente a Sergio Asenjo, y al canterano le bastó con picar el cuero para marcar y sentenciar la contienda. Al final, buenas sensaciones y conclusiones positivas, pese a algún momento incómodo en una cancha de lo más exigente.