Exhibición, recital, partidazo... Las palabras se quedan cortas a la hora de valorar el encuentro que disputó este domingo Marc-André ter Stegen. A pesar de que el cero a cuatro del FC Barcelona ante el Eibar no lo muestre así, fueron varias las intervenciones cruciales del alemán para poder imponerse a los vascos.

Para los que se quejaban de que hacía tiempo que un portero culé no era decisivo con sus paradas para el Barça, Ter Stegen lo fue. Lo demostró en el minuto 25, por ejemplo, tras un disparo realmente peligroso de Adrián González ante el que sacó una prodigiosa mano.

Volvió a aparecer para evitar un tanto cantado de Sergi Enrich y también en otro centro peligroso de Pedro León. Pero la parada ante Adrián, sobre todo, fue importante dado que tras esta, cinco minutos después, llegaría el gol de Denis Suárez. 

Ter Stegen demostró reflejos ante el Eibar

En el segundo tiempo y antes y después del segundo gol de Messi volvió a demostrar sus cualidades. Sacó otro chut de Capa, se estiró para evitar una nueva ocasión de Adrián y estuvo increíble en un disparo lejano de Pedro León.

El centrocampista se sacó un chut de "folha seca" que sorprendió a todo el mundo y buscaba colarse en la escuadra blaugrana. Rectificando en el aire, Marc-Ándré sacó una manopla salvadora.