Desde la llegada de Ernesto Valverde al banquillo, el FC Barcelona ha vuelto a potenciar la influencia de sus laterales en el juego, con dos carriles muy profundos que convierten a los defensas casi en delanteros. Con Luis Suárez fijo en el centro, es Leo Messi quien suele alimentar de balones a los costados, donde todos se benefician de los movimientos interiores.
Una de las grandes sociedades generadas a partir de esas ideas es la que forman el argentino y Jordi Alba, con una jugada maestra que ha dado infinidad de alegrías a los catalanes. Todos la conocen y todos la intentan evitar, pero a la hora de la verdad, siempre da resultado. No es la única conexión que existe en el flanco izquierdo.
Jordi Alba y Andrés Iniesta, conectados
Y es que cuando el '10' se inclina algo más hacia el perfil diestro, aparece Andrés Iniesta para combinar con el de L'Hospitalet. Buena prueba de ello es el último compromiso de Champions, en el que el capitán entregó 18 pases al lateral y este le envió el balón hasta en 21 ocasiones.
Contra la Roma, sin embargo, no fue el partido en el que más intercambiaron el esférico, ya que frente a la Juventus se cruzaron 49 pases. En lo que va de competición europea, también han dejado su huella contra el Chelsea, y sólo contra Olympiacos y Sporting de Portugal, por lesión, no coincidieron sobre el césped.
Jordi Alba, Iniesta y Messi, fijos para Valverde
Lo que está más que claro es que la magia de Iniesta y Messi ha encontrado un filón con la potencia de Jordi Alba, que es el mejor apoyo para dos cracks con los que se entiende a la perfección. El catalán es un puñal desde su vuelta al Camp Nou, pero con la llegada del Txingurri, incluso ha mejorado sus sensaciones.
Los tres forman una sociedad imprescindible en la Champions, que les coloca como intocables para Valverde. En Europa, el preparador extremeño no se la juega, y ya tiene un equipo de 'favoritos' en el que apenas debe decidir una posición. El resto son todos fijos, y por eso juegan casi de memoria.