No es la primera vez que ocurre en este curso 2017-18, pero en el Sánchez Pizjuán hubo noticia: Leo Messi no estaba de inicio sobre el céspedLas molestias en su pierna derecha, con una rotura muscular rondando, no gustaron en el FC Barcelona, que optó por la opción conservadora y decidió no arriesgar.

Salir sin el mejor jugador del mundo es un lujo que no todos se pueden permitir, pero Ernesto Valverde ha demostrado que si va en beneficio del equipo no dudará en prescindir de él. Aunque en Málaga fue una ausencia obligada, siempre ha estado en el banquillo, porque si la cosa se complica, puede cambiar partidos como suplente.

El tridente Dembélé-Suárez-Coutinho toma fuerza

Sin el rosarino en el césped, la alineación vuelve a transformarse, algo que, con el Txingurri, hace tiempo que también dejó de ser una sorpresa. Su 4-4-2 parece más un 4-3-3, con las bandas ocupadas y la misma referencia de siempre, un Luis Suárez que se multiplica para ayudar a sus compañeros.

En un esquema parecido al que presentó en La Rosaleda, son Philippe Coutinho y Ousmane Dembélé los que cubren los flancos, ambos formando un claro tridente en ataque e incorporándose hacia el centro para abrir vías a los laterales. Jordi Alba y Sergi Roberto se han confirmado como indispensables para las ideas del míster, y empiezan a entenderse con los recién llegados.

En defensa, todo cambia, porque la táctica muta en un 4-4-2 o casi en un 4-5-1. El brasileño se incrusta en el centro del campo para echar una mano a los Iniesta, Rakitic, o Paulinho, y el francés hace lo propio pero con más libertades para arrancar. Sin embargo, sus carreras hacia atrás están marcando la diferencia, algo que podría garantizarle un puesto en el once en partidos grandes.

Al tridente le falta ritmo

Eso sí, sobre el verde del Sánchez Pizjuán se ha dejado ver que a esta opción todavía le faltan minutos para madurar, porque aunque deja minutos muy prometedores, tiende a desconectarse si no hay inspiración en la medular, algo que, obviamente, no ocurre cuando está Leo Messi. Como no podía ser de otra forma, la ausencia de uno de lo mejores de la historia se nota.