El mejor jugador del mundo no sólo es pieza clave en su club, el FC Barcelona, sino que también es imprescindible en su selección. Y es que cuando Leo Messi no está, Argentina llora. Por mucho que otros escriban y a pesar de que cuando él está en el campo y las cosas no van bien se carguen ríos de tinta en su contra, sin el diez la albiceleste no sabe cómo ganar.

Eso es lo que muestra la estadística del combinado argentino en los últimos encuentros sin su estrella, aumentado con los últimos dos encuentros en los que los de Edgardo Bauza han naufragado completamente. El cúlmen fue la derrota en casa ante Paraguay (0-1) y que se une a los empates ante Venezuela y Perú consecutivos tras las primeras ausencias del rosarino en el pasado parón por selecciones y en este.  

Esos empates se unen a los otros dos que tuvieron también lugar en la fase de clasificación para el Mundial de Rusia 2018 en octubre y noviembre de 2015, ante Paraguay en Asunción (0-0) y ante Brasil en casa (1-1). Todo tuvo lugar tras la dura lesión en la rodilla de Lionel que también le privó de estar en la derrota ante Ecuador (0-2) y en la única victoria de todos los encuentros sin él, ante Colombia (0-1). 

Y es que si difícil es para la selección no haber podido alzarse con el trofeo de campeones en las últimas tres finales disputadas de forma consecutiva entre Mundial y Copas Américas, habría sido casi imposible llegar a éstas sin el genio rosarino. La presencia del mejor hace que su equipo mute en una escuadra peligrosísima. Los números así lo demuestras y esos rara vez mienten.