La comparación entre Leo Messi y Cristiano Ronaldo parece no tener final, y a cada exhibición de uno, el otro suele responder a lo grande. Además de que el portugués no deja de trabajar para mejorarse, el argentino continúa brillando con regularidad, y el trono del fútbol mundial sigue sin dejar margen a los sucesores.

Las discusiones también están a la orden del día, y engloban conceptos tan relativos sobre quien es mejor y otros tan concretos como quién marca más. Pase lo que pase, la lucha se mantiene cada temporada, y está ha vuelto a encontrar una nueva 'competición' en la que valorarles, los goles acrobáticos.

Después de infinidad de intentos fallidos, el madridista logró un tanto que se le resistía desde hace años, la chilena, con una importante diana contra la Juventus para encarrilar los cuartos de final de la Champions. Acto seguido las miradas se dirigieron hacia el de Rosario, que de momento no se ha estrenado en competición oficial.

Messi también sabe brillar de chilena

Lo cierto es que Messi no ha logrado ningún gol de esta manera, pero también lo es que apenas lo ha intentado. Ha habido algunas jugadas brillantes que acabaron anuladas por fuera de juego, en la madera o con la respuesta decisiva del guardameta rival, aunque ninguna ha logrado alcanzar la red.

Eso sí, Leo ha demostrado que si su chilena no ha llegado no es porque no sepa hacerlas, con un brillante remate en uno de los entrenamientos del FC Barcelona. Aprovechando un partidillo de una de las sesiones, el '10' la realizó con una facilidad que dejó pasmados a la mayoría de sus compañeros.

Tras un pase erróneo de uno de sus rivales momentáneos, el delantero no dudó, picó el balón y lo golpeó de tal forma que cogió desprevenido a Marc-André Ter Stegen, con una precisión que hizo imposible la estirada del alemán. Después se levantó como si nada, y es que Leo Messi es mucho Messi.