El pasado sábado Leo Messi se reencontró con el gol en el Camp Nou, poniendo fin a su sequía más larga de la temporada, pero no todo fueron buenas sensaciones. Además del empate final del FC Barcelona, al rosarino le llegaron malas noticias desde su país, donde atacaron un reconocimiento realizado en su honor.

Y es que la estatua del delantero en el Paseo de la Gloria de Buenos Aires fue dañada en un acto vandálico que la dejó maltrecha y derribada. La policía local informó que todavía no se conoce a los responsables de haber cortado las piernas del monumento, que yacía tirado en el suelo y separado de su soporte.

No es la primera vez que ocurre un hecho de estas características, ya que en enero de 2017 también fue necesaria su reparación después de que le cortaran la cabeza y los brazos. Personalidades destacadas como Roberto de Vicenzo, Emanuel Ginóbili, Juan Manuel Fangio, Guillermo Vilas, Gabriela Sabatini, Luciana Aymar, Hugo Porta, Pascual Pérez, José Meolans comparten honores junto a Messi en esta zona de Costanera del Sur.

La alegría de la jornada

El propio futbolista argentino, que en alguna ocasión ha comentado que de solucionar estos temas se encarga su padre, ha vivido un reencuentro muy especial este domingo, en el que Frank Rijkaard ha visitado el entrenamiento del Barça junto a su hijo. El holandés, que ya estuvo presenciando el partido contra el Celta, se ha fotografiado con varios futbolistas azulgrana, entre los que se encontraba un Leo Messi al que hizo debutar en el primer equipo.