El FC Barcelona consiguió salir airoso del duelo de Liga Santander contra el Atlético de Madrid y sumó tres puntos muy importantes para volver a ampliar la ventaja al frente de la tabla clasificatoria. Leo Messi fue el autor del único y definitivo tanto del partido tras un impecable disparo de falta que se coló por la escuadra de la portería de Jan Oblak.
Sin embargo, no todo fueron buenas noticias para el astro argentino. Poco después de anotar el tanto de la victoria del equipo azulgrana, protagonizó una de las jugadas polémicas del encuentro al recibir, de forma incomprensible, una cartulina amarilla por una acción a la media hora de juego.
Leo Messi tenía la posesión del balón en su campo e inició un eslalon en el que peleó con hasta tres jugadores del Atlético de Madrid, que llegaron a trastabillarle. El argentino avanzó para mantener la pelota y acabó chocando con Filipe Luis, en una acción en la que no había absolutamente nada de violencia o peligro.
Gil Manzano se disfrazó de Mateu Lahoz
El colegiado del encuentro, Gil Manzano, decidió darle un toque polémico a la jugada inventándose una cartulina amarilla para el astro argentino que la hubiese firmado el mismísimo Mateu Lahoz, inventor de las jugadas invisibles en el mundo del fútbol.
La indignación del Camp Nou, que reaccionó con una atronadora pitada al colegiado, y de los jugadores del Barça por la acción, que protestaron por no entender absolutamente nada, habló por si sola. Leo Messi vio la segunda cartulina amarilla en lo que va de Liga Santander. La primera fue contra el FC Barcelona-Sevilla de la jornada 11.