El FC Barcelona sigue sin carburar. En el partido de este sábado ante el Athletic Club, se consumó otro pinchazo, y ya van tres junto a los cosechados ante el Girona en el Camp Nou (2-2) y ante el Leganés en Butarque (2-1). Este fin de semana no fue mejor la cosa: empate y gracias ante un rival que pudo incluso llevarse los tres puntos.

A todo esto, Leo Messi fue suplente. Parece que nadie se libra de las rotaciones de Ernesto Valverde y este fin de semana le tocó el turno a un Leo Messi que, cómo no, tuvo que salir en el segundo tiempo para tratar de arreglar las cosas. En esta ocasión, mandó un balón al poste y asistió a Munir para el empate, pero no pudo consumar la remontada.

La frustración del crack del FC Barcelona hizo que, cuando se acabó el partido, se dirigiese al árbitro Jaime Latre para mostrar su descontento por alguna acción del partido. Algo de lo que le dijo Leo Messi al colegiado no le debió gustar al aragonés, que decidió sacarle la cartulina amarilla con el partido ya terminado.

La viva imagen de la tensión que se vive actualmente en el FC Barceona que, tras ganar la Supercopa de España frente al Sevilla, en las cuatro primeras jornadas de LaLiga Santander y en el debut europeo en Champions League, vio como, en apenas una semana, se producían tres tropiezos consecutivos en la competición doméstica.

Messidependencia

El FC Barcelona sigue demostrando que no acaba de arrancar si Leo Messi no está sobre el terreno de juego. Sin él jugando de titular, el conjunto azulgrana solamente ha sacado dos victorias de los últimos nueve encuentros. Datos alarmantes que hacen temblar al barcelonismo si, en alguna ocasión, el argentino pilla un resfriado.

Tras el encuentro, el propio Luis Suárez se quejó de la dependencia del equipo con Messi: "Es el mejor del mundo, pero no podemos depender de que entre Leo a solucionar las cosas. Muchos jugadores estamos aquí por méritos propios. No podemos depender de él o de Busi. Teníamos que ir ganando antes de que ellos entraran al campo".