Leo Messi sigue persiguiendo esa "copa tan linda" que prometió en la fiesta del Gamper de 2018 y el nuevo reto comienza este sábado, en el partido de vuelta de octavos de final contra el Nápoles. Un nuevo asalto a la Champions League que se iniciará en el Camp Nou con el objetivo de que los culés, que quedaron 1-1 en la ida, rematen la faena para ganarse el billete a la final a ocho de Lisboa.

Lo cierto es que Leo Messi es un seguro de vida en los partidos decisivos de octavos de final y las estadísticas así lo reflejan. El astro argentino ha marcado en 10 de los últimos 11 partidos correspondientes a la vuelta de dichas rondas y, además, suma 12 victorias seguidas en los segundos partidos de octavos de final. Dos rachas que espera mantener contra el Nápoles.

Además, cuando se confirme su titularidad, Leo Messi se convertirá en el cuarto jugador con más partidos (142) en la historia de la Champions League, dejando atrás a una leyenda del Manchester United como Ryan Giggs y atrapando a otra del Real Madrid: Raúl González Blanco. Por delante del capitán del FC Barcelona solo están Iker Casillas (177), Cristiano Ronaldo (169) y Xavi Hernández (151).

Después de dos eliminaciones complicadas en las dos últimas temporadas, con auténticas noches de pesadilla en el Olímpico contra la Roma y en Anfield contra el Liverpool, el FC Barcelona volverá a intentar recuperar el trono europeo, que no obtiene desde 2015. Y para ello, la figura de Leo Messi será fundamental tanto en lo deportivo como en lo anímico.

El capitán del FC Barcelona es el primer obsesionado con volver a levantar la 'orejona' y ha demostrado tener más hambre de victoria que nunca. Como capitán, Leo Messi se ha pasado a ser una figura más intervencionista en sus apariciones públicas, criticando lo que no le gusta del equipo y señalando el camino a seguir cuando las cosas se hacen bien. Algo que se ha ido viendo durante la temporada, como hemos explicado en 'FCBN'.

Leo Messi, el líder de este FC Barcelona

La responsabilidad de Leo Messi es gigante y también lo es su compromiso. Prueba de ello es la reconversión de su juego, que ha pasado a ser individualista a ser mucho más sacrificado y colectivo. No obstante, Quique Setién es consciente de lo necesario que es tener al argentino cerca del área para finalizar jugadas, motivo por el que ante el Nápoles se podrá ver la versión más adelantada del crack.