Puede que no haya sido el gol de más bella factura del Mundial de Rusia 2018, teniendo en cuenta los golazos que se han visto hasta ahora, pero lo que está claro es que la diana de Leo Messi frente a Nigeria, para abrir el partido de este martes en San Petersburgo, será uno de los que más se verán en los telediarios a lo largo de las próximas horas... Y días.
El astro argentino del FC Barcelona era uno de los pocos 'cracks' que todavía no habían marcado en el Mundial de Rusia 2018. Neymar Jr, Cristiano, Harry Kane, Salah... Todos habían visto puerta ya con sus respectivas selecciones, y este martes le tocó a Leo Messi.
Corría el primer cuarto de hora de partido cuando Éver Banega, con un pase en largo exquisito, encontró a Leo Messi desmarcado para que el '10' controlara el esférico con el muslo primero, y luego con la pierna izquierda, antes de definir a la perfección con la derecha.
Fue un golazo en mayúculas, dada la dificultad de hacer todo lo que hizo Messi, en carrera, a velocidad de relámpago para a continuación sacarse un disparo potente y colocado ante el cuál el portero de Nigeria no pudo hacer nada. La diana, como es natural, enloqueció a los 25.000 aficionados de Argentina que ocupaban las gradas del estadio en San Petersburgo.
Y, en particular, sirvió para que Leo Messi se quitara un peso enorme de encima, tirándose al piso y dirigiendo los brazos al cielo, como hace normalmente, pero en esta ocasión de manera más marcada. Messi se lo dedicó a su abuela, como siempre, pero seguro que también se lo dedicó a sí mismo, a su capacidad para superarse y sacar adelante situaciones enrevesadas.
Messi se quita un gran peso de encima
Leo Messi había sido criticado de todas las formas posibles por la prensa argentina, 'crucificado' por algunos aficionados y con una presión sobre los hombros que jamás había tenido con la albiceleste, al menos a estos niveles. Su gol ante Nigeria sirvió para sacarse de encima esa energía negativa y encarar los minutos venideros con un rictus muy distinto en su juego. Apareciendo más. Convirtiéndose en el gran 'Messías' de Argentina.